CIUDAD DEL VATICANO, miércoles, 24 noviembre 2004 (ZENIT.org).- Juan Pablo II aseguró este miércoles al final de la audiencia general que reza por Ucrania, país que se encuentra sumido en una profunda crisis tras las denuncias de fraude en las elecciones presidenciales.
Tomando la palabra en ucraniano, el Santo Padre se dirigió a los peregrinos presentes en el Vaticano de ese país: «Queridos, os aseguro a vosotros y a todo el pueblo ucraniano que en estos días rezo de manera particular por vuestra querida patria».
Banderas amarillo-azules se agitaron en respuesta del saludo del Papa. Fueron enarboladas por algunos de los 60 peregrinos de ese país presentes en el Aula Pablo VI, a quienes se añadieron varias decenas de seminaristas, sacerdotes y estudiantes ucranianos en Roma.
El saludo no aparecía en el discurso que se había distribuido a la prensa en un primer momento, fue añadido por el Papa posteriormente.
A pesar de que las calles de Kiev estaban inundadas de gente que aclamaba al líder opositor ucraniano, Víctor Yúschenko, la Comisión Electoral Central (CEC) de Ucrania proclamó este miércoles presidente electo del país al primer ministro Víctor Yanukóvich.
Según los datos definitivos, anunciados en una tempestuosa reunión de la CEC en la que hubo se dieron intentos de solucionar los diferendos con los puños, Yanukóvich obtuvo el 49,46 por ciento ó 15.093.691 votos, mientras que Yúschenko consiguió el 46,61 por ciento ó 14.222.289 votos.
La comunicación fue recibida en la sala con vítores de los partidarios del primer ministro y con gritos de «vergüenza» de los favorables a Yúschenko.
Poco antes el líder de la oposición ucraniana había declarado ante más de un centenar de miles de sus partidarios en la plaza de la Independencia que estaba dispuesto a aceptar la repetición de las elecciones presidenciales, pero a condición de que sean «limpias y transparentes», según informa la agencia EFE.
Yúschenko precisó que se necesita cambiar la composición de la Comisión Electoral Central, a la que acusa de fraude, y aprobar una ley que prohíba el voto fuera del lugar de residencia, principal instrumento del pucherazo, según la oposición.
El líder opositor anunció que el presidente de Polonia, Aleksander Kwasniewski, llegará próximamente a Ucrania con «poderes de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa» para mediar en la crisis política.
Con su oferta, Yúschenko intentó dejar entreabierta una posibilidad de diálogo con las autoridades, después de que el lunes lanzara una campaña de desobediencia civil seguida de manera masiva en Kiev y las regiones occidentales del país en respuesta al «fraude masivo y brutal», denunciado por la oposición.
El anuncio de la CEC redujo considerablemente el campo de negociación, pues el presidente saliente de Ucrania, Leonid Kuchma, aunque ha afirmado que no se empleará la fuerza contra los opositores, fue categórico en señalar que la Comisión Electoral Central es la que decide en materia de comicios y hasta acusó a la oposición de tratar de dar un golpe de Estado.