CIUDAD DEL VATICANO, martes, 1 febrero 2005 (ZENIT.org).- A las 22.50 horas de la noche de este martes, Juan Pablo II, con gripe desde el domingo pasado, fue ingresado en el Policlínico Gemelli de Roma «de manera urgente» –comunicó el portavoz del Vaticano, Joaquín Navarro-Valls— debido a una laringotraqueitis aguda y una crisis de laringoespasmo.
El Papa se encuentra en la décima planta del centro sanitario –en la habitación para él destinada–, no en el servicio de reanimación, aclaró Navarro-Valls en un breve comunicado.
Fue internado «por precaución» a causa de «una complicación del síndrome gripal» que padece.
Exámenes radiográficos y un TAC son las pruebas que se están practicando al Papa.
Ya había manifestado síntomas de gripe al rezar el domingo el Ángelus y suspendió el lunes sus audiencias por consejo médico.
También se había adelantado que el Papa no podría participar en la audiencia general del miércoles ni en la celebración eucarística que tendrá lugar en la Basílica de San Pedro del Vaticano en la Jornada Mundial de la Vida Consagrada, ese mismo día.
