CIUDAD DEL VATICANO, viernes, 4 febrero 2005 (ZENIT.org).- Dado que Juan Pablo II se encuentra hospitalizado, este viernes el cardenal Angelo Sodano, secretario de Estado de la Santa Sede, recibió en audiencia al nuevo presidente del Parlamento Europeo, Josep Borrell Fontelles, quien auspició en el encuentro la aprobación del Tratado constitucional de la Unión Europea.

En el encuentro, según reveló un comunicado de prensa publicado por Joaquín Navarro-Valls, portavoz vaticano, Borrell, presidente del Europarlamento desde el 20 de julio de 2004, se encontraba acompañado por su directora de Gabinete, Christine Verger, y por el jefe de la Oficina del Parlamento Europeo en Roma, Giovanni Salimbeni.

Por su parte, en el encuentro, el cardenal Sodano estaba acompañado por el secretario vaticano para las Relaciones con los Estados, el arzobispo italiano monseñor Giovanni Lajolo.

«Ante todo, el presidente pidió que le presentaran al Santo Padre Juan Pablo II su deseo y el del Parlamento Europeo de que se recupere cuanto antes», revela el comunicado publicado al final del encuentro por el director de la Oficina de Información de la Santa Sede.

«El presidente Borrell Fontelles expuso después algunos aspectos de la actividad del Parlamento en estos momentos y las perspectivas que plantea la ampliación de la Unión Europa, deseando que se dé una ratificación del Tratado constitucional por parte de todos los Estados».

« El Presidente, en sintonía con lo que siempre ha sostenido la Santa Sede, ha subrayado la naturaleza de la Unión Europea como "potencia moral", con un mensaje propio de civilización siempre válido, que hay que proponer en el contexto internacional más amplio».

«Durante la conversación, también se habló de la problemática debida a la presencia de tres grandes organismos europeos, la Unión Europea, el Consejo de Europa y la Organización para la Cooperación y la Seguridad en Europa (OCSE), concordando que es necesario aclarar estas relaciones».

«El cardenal secretario de Estrado subrayó asimismo la importancia de la Nunciatura Apostólica acreditada ante la Unión Europea para favorecer un diálogo fecundo sobre los grandes temas del momento», concluye el comunicado.

Cabe señalar que en estos momentos queda vacante el cargo de nuncio apostólico ante la Comunidad Europea, después de que el arzobispo Faustino Sainz Muñoz fuera nombrado en diciembre nuncio apostólico en Gran Bretaña.

Josep Borrell, español y exponente del Partido Socialista, desempeñó un papel decisivo en octubre pasado a la hora de imponer el veto que impidió al ministro italiano Rocco Buttiglione ser Comisario europeo a la Justicia y a las Libertades por manifestar sus convicciones cristianas sobre la homosexualidad y el matrimonio.

El pasado 27 de enero, los jefes de delegación de todas las corrientes políticas de Polonia representadas en el Parlamento Europeo difundieron un comunicado en el que criticaban la «falta de respeto» de Borrel por su país, según informó el 31 de enero el diario francés «Le Monde»

En una entrevista concedida el 10 de diciembre, el presidente del Europarlamento se inquietaba por el resultado del referéndum sobre al Tratado constitucional europeo que tendrá lugar en ese país y criticaba la «raíz nacionalista» polaca, «ligada a los valores religiosos profundamente arraigados».