ROMA, sábado, 4 febrero 2006 (ZENIT.org).- La llegada de Internet y de otras nuevas tecnologías mediáticas ha ampliado rápidamente las vías de promoción del mensaje de las iglesias y de otras organizaciones religiosas. El 3 de enero, la agencia de noticias FIDES, de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos, publicaba la primera parte de un dossier, «El Pueblo de Dios en Internet».
El informe afirma que en Italia resulta casi imposible contar el número de páginas webs católicas debido al rápido crecimiento de este sector. El número de links da una idea del florecimiento de las páginas webs católicas. Links a una de las páginas webs más populares, www.totustuus.it, se pueden encontrar casi en 50.000 páginas webs.
Otra página web, www.siticattolici.it, tiene más de 10.000 páginas webs de Italia registradas. Casi un cuarto del total pertenece a parroquias; otros 2.000 pertenecen a grupos y organizaciones privadas. Los institutos religiosos y misioneros cuentan con 1.222; y las páginas webs asociadas a estructuras oficiales de la Iglesia y a actividades pastorales suman 589. En orden descendente están: páginas de naturaleza católica, 589; universidades y centros culturales, 403; y páginas asociadas de medios, 353.
El volumen de abandonos es notable, con 1.400 páginas que ya no están disponibles con respecto a hace dos años. Pero el índice de crecimiento del número de total de páginas webs es grande, con un aumento del 25% en los últimos dos años. El crecimiento ha sido particularmente grande en el campo de la música cristiana, con un aumento del 33,6%; radio y televisión católicas, 32,8%; y arte religioso, 31,5%.
En Estados Unidos también florece la cultura de Internet sobre temas religiosos. Jonathan Last, editor online del Weekley Standard, dio un retrato de la situación en la entrega de diciembre de la revista First Things.
Blogs
En su artículo, «Dios en Internet», Last citaba una encuesta de Pew de 2004 que encontró que el 64% de los usuarios – 82 millones de personas – afirmaban utilizar la web para fines religiosos. De estos, el 32% afirmaron utilizar Internet para seguir las noticias religiosas; el 17% lo utilizaban para buscar lugares de culto; y el 11% para bajarse música espiritual.
Y el más reciente fenómeno de los blogs no está exento del uso religioso. Un blog – abreviación de web log – es una página web en la que las entradas diarias se colocan de acuerdo a un criterio regular y se presentan en orden cronológico inverso. El número total de blogs en Estados Unidos está cerca de los 8 millones. El pasado octubre tuvo lugar la primera convención de bloggers religiosos, GodblogCon, organizada por John Mark Reynolds, profesor de filosofía en la Universidad Biola, una universidad cristiana de California.
Reynolds contó a Last que hay «millones literalmente» de bloggers religiosos. Entre estos hay un par de miles que escriben para un mercado que es más amplio que la inmediata familia o comunidad. El número de accesos varía ampliamente. Un pequeño Godblog puede recibir sólo 115 visitas al día, mientras otros pueden alcanzar miles. Incluso los sacerdotes se están poniendo manos a la obra; Last estima que cerca de 50 sacerdotes tienen actualmente sus propios blogs.
Last también hace notar que casi todas las iglesias de Norteamérica tienen su propia página web. Las iglesias protestantes generalmente tienen páginas más avanzadas que las católicas, aunque la desventaja se debe en parte a la enorme popularidad y profundidad de la página web del Vaticano.
Esta proliferación de actividad en la web también tiene sus desventajas, añade Last. Cualquier persona puede levantar una página o un blog – por lo que los usuarios necesitan estar atentos a la calidad de la información. Luego, la naturaleza del medio lleva hacia la trivialización o la polémica ocasional. La comercialización es otra tendencia ante la que hay que estar atentos, puesto que las páginas webs se originaron para sacar dinero de los usuarios vendiéndoles toda suerte de productos.
Descargar la buena nueva
La creciente popularidad de los iPods está abriendo nuevos caminos a la transmisión de la religión. Los iPods son un tipo de reproductores de audio digitales. Utilizan podcasts, una forma de grabación que utiliza archivos de audio descargables. Ahora, los podcasts se han convertido en Godcasts, informaba el periódico británico Telegraph el 5 de agosto.
Un gran número de personas están utilizando sus dispositivos portátiles de música para bajarse homilías. El artículo narraba cómo un vicario anglicano, Leonard Payne, se quedó asombrado cuando, en un corto espacio de tiempo, más de 2.400 usuarios se bajaron uno de sus sermones. Y esto ha ocurrido con un vicario en una remota parroquia rural.
El 29 de agosto, el New York Times informaba del creciente uso en Estados Unidos de material de audio religioso para bajarse. El año pasado, en sólo un mes, en julio, el número de personas o grupos que ofrecían podcasts espirituales y religiosos recogidos en una página web creció de 177 a 474.
Entre todas las religiones, son los grupos cristianos los más activos en el campo de los podcasts, afirmaba el Times. Una popular página web católica, elaborada por el sacerdote holandés P. Roderick Vonhögen, ya ha logrado más de 10.000 oyentes para cada programa. Radio Vaticana también elabora material para bajarse en varios idiomas.
Otro medio popular de comunicación son los SMS – mensajes de texto enviados a través de los teléfonos móviles. Aquí también la religión ha encontrado un espacio, informaba el 6 de octubre el periódico australiano Sydney Morning Herald.
La Biblia está ahora disponible para enviar vía SMS. De esta forma en vez de leer el Génesis: «In the beginning God created the heavens and the earth»; se puede leer: «: «In da Bginnin God cre8d da heavens & da earth».
La iniciativa viene de la Sociedad Bíblica de Australia que ha traducido 31.173 versículos de la Biblia a este formato. Puede accederse a ellos gratis por Internet y cualquiera puede enviar versículos individuales a la familia o a los amigos como SMS.
«Han quedado atrás los viejos tiempos en que la Biblia sólo estaba disponible dentro de una portada negra y sombría con una cruz sobre ella», afirmaba el portavoz de la Sociedad Bíblica, Michael Chant. Convertir a texto todo el Nuevo y el Antiguo Testamento le llevó a una persona sólo cuatro semanas. «La idea es que la Biblia pueda usarse y sea relevante y se actualice, como conseguir un versículo del día o leer el horóscopo», afirmaba Chant.
Las iglesias a la gran pantalla
Las nuevas técnicas mediáticas también están usándose para reavivar los servicios de la iglesia. La tendencia es hasta ahora más común en las iglesias protestantes. El 21 de enero, el Los Ángeles Times describía cómo la Iglesia Metodista Unidas de Santa Margarita, en el condado de Orange, utiliza grandes pantallas para presentar la letra de los himnos. Cuando el pastor da su sermón utiliza vídeo clips de películas para acompañar sus palabras. Tres cámaras graban todo para utilizarlo en la página web de la iglesia.
Según el artículo, el año pasado más del 60% de las iglesias protestantes de la nación utilizaron un sistema de proyección con una gran pantalla, un 39% más que en el 2000. Y el porcentaje de congregaciones que utilizan servicios de vídeo se ha doblado en el mismo lapso de tiempo, hasta un 61%. Algunas iglesias también envían material vía e-mail y podcasts.
La tecnología no sale barata. La iglesia del condado de Orange se ha gastado cerca de 75.000 dólares en equipo, más 15.000 dólares al año para personal y mantenimiento.
No todos se muestran en
tusiastas con los cambios. El pastor baptista Ken Uyeda Fong afirmó que algunas personas no ven las nuevas ayuda como muy religiosas. Otros no se ven inclinados a estar mirando pantallas en una iglesia, en vez de los medios activos y tradicionales de participar.
A nivel individual también están floreciendo los programas multimedia. Las ventas anuales de software religioso han alcanzado los 80 millones de dólares, informaba el 2 de enero el Boston Globe. Existen una multitud de programas que ofrecen traducciones de la Biblia, imágenes, comentarios y otros materiales. Según parece, la palabra de Dios se extiende con rapidez.
