«Unos muchachos han tomado por el cuello al sacerdote, y le gritaron: «os mataremos a todos»», ha revelado a la agencia «AsiaNews» el obispo Luigi Padovese, vicario apostólico de Anatolia, la misma diócesis en la que trabajaba don Antonio Santoro, asesinado el 5 de febrero.
Según explica el prelado a la agencia del Pontificio Instituto para las Misiones Extranjeras, la agresión es «fruto evidente de fanatismo». Tuvo lugar en la parroquia que dirigen los Frailes Conventuales.
El religioso agredido, de nacionalidad eslovena, según el obispo, ha presentado una denuncia a la Policía, «que no ha prestado mucha atención a la noticia de la agresión».
