TURÍN, domingo, 12 febrero 2006 (ZENIT.org).- Todos los participantes en los Juegos Olímpicos de Invierno de Turín pueden tener una cita «De corazón a corazón» con Jesús.
Se trata de un momento diario de adoración a Cristo, presente en la Eucaristía, en tres iglesias de la ciudad de Turín con puertas abiertas.
Don Fabiano Gheller, salesiano de Don Bosco –nos encontramos en la ciudad de san Juan Bosco– explica a los lectores de Zenit en qué consiste la operación: «De corazón a corazón».
Salesiano, de 26 años, y estudiante en teología en Turín, participa en el comité de organización «De corazón a corazón» que se compone de los principales movimientos y asociaciones presentes en la diócesis de Turín.
–¿Cómo ha surgido esta iniciativa?
–Fabiano Gheller: Tras la Jornada Mundial de la Juventud de Roma, en 2000, siguiendo la invitación de Juan Pablo II de poner la Eucaristía en el centro de la vida personal y comunitaria, nació «De corazón a corazón». Desde hace tres años, en el corazón del centro histórico de Turín, el viernes por la noche, en los meses en los que es posible dejar abiertas las puertas de una iglesia, una de ellas queda abierta para la adoración eucarística. Quien pasa por allí, puede encontrarse con Jesús, realmente presente. Es la zona de los bares y pubs nocturnos: un cruce de caminos, de encuentros entre amigos, de jóvenes de diferentes nacionalidades. Las noches de diversión pueden convertirse en una ocasión para encontrar a Dios. Las Olimpiadas de invierno son una oportunidad para que esto pueda tener lugar todos los días.
–Pero, ¿de dónde viene el nombre «De corazón a corazón»?
–Fabiano Gheller: Es una expresión que tiene antiguas raíces, tanto en san Francisco de Sales como en el cardenal John H. Newman. Hace referencia a dos profundidades que se encuentran: el corazón de Dios habla al corazón del hombre. Es el idioma de la oración silenciosa, de la adoración, expresado en un pequeño mensaje escrito y colocado ante el santísimo Sacramento, interpelado por la Palabra de Dios. Es una oración que continua con la luz de las velas encendidas y que es recogida por quien toma el relevo en la iglesia, ante Jesús Eucaristía.
–¿Quién organiza y promueve la «adoración olímpica»?
–Fabiano Gheller : Ante todo Jesús, que espera a quienes pasan junto a la iglesia y entran movidos por la curiosidad de la música o de la luz de las velas que arden. Luego están también los grupos de chicos y chicas que animan la velada, acogiendo a los visitantes, cantando, tocando instrumentos. Por último, hay sacerdotes disponibles para ofrecer una palabra y el perdón del Señor. El «De corazón a corazón» olímpico involucra, además, a 43 congregaciones religiosas, que están presentes con religiosos y religiosas para rezar, catorce conventos de clausura se unirán espiritualmente con la oración, y contamos con la ayuda de 25 coros.
Luego está la secretaría organizativa, en la que están representadas, formando un cuerpo único sin distinciones, como expresión de la única Iglesia, reunida en torno a su único Bien, la mayor parte de las realidades más significativas de la iglesia local: el seminario mayor, los salesianos de don Bosco, el Movimiento de los Focolares, Comunión y Liberación, el Servicio Misionero Jóvenes, los scouts, y representantes de las parroquias y de los laicos.
–¿Dónde y cuándo es la cita «De corazón a corazón» con Jesús?
–Fabiano Gheller: Hay tres iglesias que acogen la adoración: la de los Santos Mártires, la de la Santísima Trinidad (ambas en Vía Garibaldi) y la catedral. En la iglesia de los Santos Mártires, hemos tenido la cita este sábado y domingo, y las próximas serán del 18 al 19 de febrero, de las 15,00 a las 18,00. En la Santísima Trinidad del 11 al 25 de febrero, excepto el jueves y el domingo, de las 20,30 a las 23,30. Por último, en la catedral, el 16 y el 23 de febrero, de las 20,30 a las 23,30. ¡No se lo pierdan!
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