CIUDAD DEL VATICANO/DAHAB, martes, 25 abril 2006 (ZENIT.org).- El presidente del dicasterio de la Pastoral para los Migrantes e Itinerantes, el arzobispo Agostino Marchetto, ha expresado su «profundo dolor y tristeza» por el triple atentado que en la localidad egipcia de Dahab ha segado la vida a no menos de 18 personas y ha dejado heridas a más de medio centenar.
En una misiva enviada –desde el Pontificio Consejo— al arzobispo Michael Louis Fitzgerald, nuncio apostólico en El Cairo, el prelado italiano le transmite su pesar por la tragedia terrorista «que ha causado la pérdida de muchas vidas humanas y graves heridas de muchos inocentes, entre ellos numerosos turistas».
«Con fe dirigimos al Omnipotente y Misericordioso Señor nuestras oraciones comunes para que conceda el descanso eterno a las víctimas y dé fortaleza y valor a quienes han sido golpeados por el luto y el sufrimiento», expresa monseñor Marchetto.
Igualmente el prelado manifiesta su «viva solidaridad hacia cuantos tendrán que hacer frente a las consecuencias de este golpe» lanzado a la industria turística egipcia, muy importante en la economía del país.
En el Mar Rojo, cerca de la frontera con Jordania, Dahab es una localidad turística. En estos días de fiesta es punto de encuentro de miles de personas, sobre todo israelíes y europeos.
Tres explosiones sacudieron la localidad la tarde del lunes en tres puntos, todos céntricos: un supermercado, un restaurante y una cafetería.
«El atentado en Dahab ha sido condenado con firmeza por la comunidad internacional y desde Gaza ha llegado también inmediatamente la condena del gobierno palestino encabezado por “Hamás”», recoge «L’Osservatore Romano» en su última edición.
«La siniestra sombra del terrorismo vuelve a alargarse sobre el mundo. Proyectos criminales que –como ha subrayado Benedicto XVI en el mensaje para la Jornada Mundial de la Paz– “se inspiran con frecuencia en un nihilismo trágico y sobrecogedor”», lamenta el diario.
Crímenes similares se perpetraron en el país en Taba en 2004 (a unos 50 kilómetros al norte de Dahab; 34 muertos) y Sharm El Sheikh en 2005 (a 80 kilómetros al sur de Dahab; 64 muertos).