CIUDAD DEL VATICANO, lunes, 24 julio 2006 (ZENIT.org).- Una agencia informativa de la Santa Sede ha constatado el «malestar» de la Iglesia católica por las «contradicciones» del gobierno de Bolivia que ha firmado un acuerdo para mantener la religión en las escuelas y aprueba una educación laica que acabaría con el «monopolio religioso» de la Iglesia.
Según informa la agencia «Fides», órgano informativo de la Congregación vaticana para la Evangelización de los Pueblos, el debate sobre el proyecto de reforma de la Educación en Bolivia no ha terminado todavía.
Los representantes católicos han manifestado su malestar ante el gobierno por la aprobación en el Congreso Nacional de Educación, celebrado la semana pasada, en Sucre, de la «educación laica», cuando unas pocas horas antes se había firmado un acuerdo entre el gobierno y la Iglesia para mantener la asignatura de religión en las escuelas.
La resolución aprobada textualmente en el Congreso Nacional señala que «la educación en Bolivia es laica, pluralista, porque respeta la espiritualidad de cada cultura, la libertad de creencias, promueve los valores propios y rechaza todo tipo de dogmatismos».
Además el Ministro de Educación Félix Patzi, anunció que con la nueva Ley General de Educación se acabaría con el «monopolio religioso» de la Iglesia, indicando que hay un enfrentamiento del pueblo por no tener en consideración las otras corrientes religiosas.
Una reciente encuesta citada por Fides sostiene que el 77% de los bolivianos se declaran católicos y cerca del 95% cristianos.
Varios Obispos han expresado su disconformidad con los resultados del Congreso. El Arzobispo de Cocahbamba, monseñor Tito Solari denunció el ambiente politizado en el que se desarrolló el Congreso, sin espacio para el dialogo.
Por su parte, monseñor Estanislao Dowlaszewick, obispo Auxiliar de Santa Cruz de la Sierra afirmó que «algunos viven hoy día como con una especie de alergia a la religión y a la Iglesia» presentándola «como un peligro para el futuro de la patria» y quitando «no sólo la religión sino también a Dios de la enseñanza».
El arzobispo de La Paz, monseñor Edmundo Abastoflor, afirmaba que «es una locura pensar que Dios no existe o que podemos prescindir de Él» y ha exhortado al gobierno a no caer en situaciones de enfrentamientos y violencia sino a «buscar la verdad, la justicia, la rectitud y la honestidad que son caminos que Dios nos presenta para la construcción de esa Bolivia mejor que todos anhelamos».
Monseñor Jesús Juárez, Obispo de El Alto se pegunta: «¿se respeta la libertad cuando se imponen criterios o decisiones que van en contra de los valores y el sentir de la población o cuando se adoptan ideas extrañas a la tradición e idiosincrasia del pueblo profundamente religioso y cristiano?».
Diversos representantes de colegios católicos así como asociaciones de padres de familia han anunciado la realización de movilizaciones y marchas para defender el derecho a la enseñanza religiosa, después de la aprobación del a enseñanza laica. Javier Soria, representante de la Junta Escolar de Padres de Familia de Santa Cruz ha afirmado que «el Estado está queriendo pasar por encima de la familia» porque son los padres los que deben decidir el tipo de educación para sus hijos.
«Manifestamos nuestro rechazo a las pretensiones del Gobierno de eliminar la enseñanza religiosa» afirmó, recordando que se realizara diversas movilizaciones para «defender la fe cristiana sus principios y valores».