CIUDAD DEL VATICANO, jueves, 26 abril 2007 (ZENIT.org).- A pesar de la conciencia común de que la búsqueda de la caridad y de la justicia a nivel internacional es de importancia fundamental para la sociedad de hoy, se detectan a la vez señales que actúan en dirección opuesta, alerta la Academia Pontificia de las Ciencias Sociales.
Este jueves, la presentación de la XIII Sesión Plenaria del organismo pontificio a la prensa -en el Vaticano- dio oportunidad de trazar el panorama global actual.
La amplia convocatoria internacional y multidisciplinar de expertos, del 27 de abril al 1 de mayo en el Vaticano, indagará sobre la factibilidad de una colaboración, entre naciones, en el campo de la caridad y de la justicia en un mundo globalizado.
La reflexión debe afrontar «nuevos signos de los tiempos que resultan muy preocupantes», reconoce la Academia Pontificia.
El «resurgimiento del nacionalismo» es uno de esos signos.
En este sentido, tanto en países en vías de desarrollo como países avanzados «hay señales de crisis acerca de dos características clave en el proceso de globalización: el primero es un problema humano ligado a la creciente emigración internacional legal e ilegal y la consiguiente resistencia política a ella; el segundo es económico y está relacionado con las tensiones entre proteccionismo y libre mercado», explica.
A las sombras del panorama actual se suma el hecho de que «los signos de convergencia económica y social» y educativa entre países ricos y países pobres se limitan todavía a pocos de estos últimos.
«A la vez, hasta en países con una economía en rápido crecimiento, la incidencia de la pobreza y de la pobreza extrema es aún muy elevada», expresa la Academia Pontificia.
Asimismo da la voz de alarma sobre la «debilidad del multilateralismo». Y es que «el bilateralismo está creciendo cada vez más y muchas instituciones multilaterales, como la ONU, la OMC, el FMI, el Banco Mundial y hasta algunas de sus homólogas regionales muestran signos de debilidad y cansancio», y aún así «ninguna institución está actualmente surgiendo para ocupar su lugar».
Por su parte, respecto a los «Objetivos del Milenio» existen «dudas fundadas» de su verdadera consecución «en los tiempos previstos». Tales objetivos se basaban en un amplio consenso internacional que está «empezando a desmoronarse», por lo que la Academia Pontifica apremia a reflexionar sobre mecanismos que permitan el logro de estas metas, junto a la formulación de nuevas propuestas.
Contrario igualmente a la búsqueda de la caridad y de la justicia a nivel internacional es la realidad de «ayudas insuficientes e ineficaces».
«La ayuda proporcionada ha sido muy inferior respecto al objetivo de destinar el 0,7% del PIB de los países desarrollados para las ayudas internacionales», además de que la ayuda que sí se ha brindado ha sido con frecuencia mal distribuida y mal utilizadas por organizaciones intencionales, gobiernos y agencias locales, señala la Academia Pontificia.
Ésta no olvida otro factor: «el inicio del nuevo siglo ha estado caracterizado por un relevante incremento del azote social y moral del terrorismo», a la vez que «el mundo sigue padeciendo guerras a gran escala y guerras civiles».
«Caridad y Justicia en las relaciones entre pueblos y naciones» se propone, pues, como eje de la Sesión Plenaria que comienza el viernes la Academia Pontificia de las Ciencias Sociales, buscando respuestas a los interrogantes planteados sobre todo a la luz del Magisterio de la Iglesia.
Más información, programa y participantes en el enlace http://www.vatican.va/roman_curia/pontifical_academies/acdscien/documents/rc_pa_acdscien_doc_20070327_social_plenary-session-2007_programme_en.html .