LA HABANA, domingo, 13 enero 2008 (ZENIT.org–El Observador).- La Iglesia católica de Cuba ha iniciado los preparativos para la celebración del décimo aniversario de la histórica visita que hiciera del 21 al 26 de enero de 1998 el Papa Juan Pablo II.
Impulsada por los recientes anuncios de apertura realizados por el régimen cubano, que el cardenal Jaime Ortega y Alamino, arzobispo de La Habana, en su homilía de Año Nuevo en la catedral, calificó de «paso prometedor que ha creado expectativas», la Iglesia cubana se apresta a buscar nuevas condiciones para el desarrollo de la práctica religiosa en la Isla caribeña, así como del respeto a los derechos humanos.
A este respecto, según informaba Zenit el 6 de enero pasado, la revista «Nueva Palabra» de la Arquidiócesis de La Habana pidió que los cambios, anunciados por el Gobierno como graduales, no lo sean tanto que no se vean y pronto.
El décimo aniversario de la visita del Papa Juan Pablo II a Cuba contará con la presencia del secretario de Estado de El Vaticano, cardenal Tarsicio Bertone, quien realizará una breve visita a este país.
En entrevista concedida a la revista «Espacio laical», órgano del Consejo de Laicos de la Arquidiócesis de La Habana, el cardenal Jaime Lucas Ortega y Alamino, cosnideró que la visita del Santo Padre Juan Pablo II en 1998 «fue algo único, no solo para mí: la visita del Papa marcó la vida de la Iglesia en Cuba y nuestra historia como nación»
«La Iglesia se dio a conocer a nuestra sociedad, y se dio a conocer al mundo entero: la Iglesia católica estaba ahí, estaba viva, junto a su pueblo», dijo el cardenal Ortega y Alamino a «Espacio Laical».
En el mensaje que dirigió el Papa Benedicto XVI al cuerpo diplomático acreditado ante la Santa Sede el pasado 7 de enero, se refirió a este acontecimiento, recalcando que el mensaje de Juan Pablo II a Cuba y al mundo sigue teniendo absoluta vigencia.