WASHINGTON, domingo, 4 mayo 2008 (ZENIT.org–El Observador).- Una de las características del vibrante crecimiento que ha experimentado el catolicismo en Estados Unidos tiene que ver con el ascenso del componente hispano de la población del país, que alcanza ya los 301 millones de habitantes.
El catolicismo hispano tuvo clara presencia en la reciente visita del Papa Benedicto XVI a los Estados Unidos el pasado mes de abril. Durante esta visita papal, el pontífice abogó por un reconocimiento cabal de los derechos humanos de los inmigrantes, y de sus familias, en concordancia con la campaña lanzada por la Conferencia del Episcopado de los Estados Unidos para encontrar en el Congreso medidas de reforma integral al sistema de migración de este país.
De acuerdo con datos ofrecidos esta semana por la Oficina del Censo de Estados Unidos, la población hispana alcanza ya 15 por ciento de la población total del país más poderoso (económicamente hablando) del planeta. Los hispanos suman hoy 45 millones, en comparación con los 35 millones que había en el año en 2000.
Por lo demás, según la Oficina del Censo, buena parte del crecimiento de la población hispana, un 62 por ciento, durante 2007, se debió a nacimientos de descendientes de hispanos con residencia o ilegales en Estados Unidos y no a la inmigración. Muy cerca de la mitad del crecimiento poblacional de Estados Unidos desde el año 2000 se ha debido a la población latina.
Un estudio publicado por el Pew Hispanic Center, demuestra que la inmigración se ha disparado desde el año 2000; y en la actualidad ingresan a Estados Unidos cerca de un millón de personas de origen hispano, siendo medio millón de ellas mexicanas y cerca de 100 mil de los países de Centro América; el resto es de Sudamérica y del Caribe.
De continuar la tendencia, uno de cada cinco estadounidenses serán de origen hispano en el 2050, lo cual representa un reto y, al mismo tiempo, una oportunidad para la Iglesia católica estadounidense, que se ha caracterizado por una labor de defensa y de justicia al inmigrante hispano.