CIUDAD DEL VATICANO, viernes, 13 junio 2008 (ZENIT.org).- Al premiar al escritor e historiador italiano Marco Roncalli, la Fundación Internacional Raoul Wallenberg ha premiado la obra de promoción del diálogo entre religiones del Papa Juan XXIII.
Roncalli es uno de los mayores expertos en la figura de ese pontífice, que con su obra de investigación, plasmada en numerosos libros y artículos, ha servido para demostrar cómo antes de ser obispo de Roma, en plena segunda guerra mundial, salvó vidas de judíos perseguidos.
Roncalli, cuyo abuelo era el hermano menor de aquel Papa (Angelo G. Roncalli), nacido en Bérgamo (norte de Italia), desde 25 años investiga sobre esta figura.
La Fundación Internacional Raoul Wallenberg le entregó el 12 de junio por primera vez la medalla «Angelo Giuseppe Roncalli» en el Centro Rusia Ecuménica, que se encuentra a pocos metros del Vaticano.
Participaron en el acto representantes del cuerpo diplomático, entre ellos, el embajador de Gran Bretaña ante la Santa Sede, Francis Martin-Xavier Campbell, y el actual representante de Argentina ante el Vaticano (en espera del nombramiento de un embajador), Hugo Javier Gobbi.
Entre los representantes religiosos , participaron Gary L. Krupp, fundador de la Pave the Way Foundation, institución para la promoción del diálogo interreligioso, así como representantes de la Iglesia católica.
En su mensaje a los participantes, Baruj Tenembaum, creador de la Fundación Internacional Raoul Wallenberg, recordó la obra de salvación de judíos realizada en Bulgaria y Turquía por monseñor Roncalli cuando era representante papal ante esos países.
Como delegado apostólico del Papa, en Estambul, en 1944, «organizó una red de salvataje de judíos y otros perseguidos por el nazismo. Gracias a sus acciones miles de condenados a muerte salvaron sus vidas», recordó el fundador.
Por otro lado, constató, «una nueva era en las relaciones de la Iglesia católica con el judaísmo se inauguró con el pontificado de Juan XXIII, el ‘Papa bueno’. Se trató de una nueva época de comprensión y tolerancia después de siglos de denigración, prejuicio y persecución religiosa».
«Las puertas del diálogo interreligioso que comenzaran a abrirse entonces por obra de Juan XXIII, han sido abiertas de par en par durante el pontificado del Papa Juan Pablo II, el Papa que solía dirigirse a los judíos como ‘los hermanos mayores’; que visitara los campos de exterminio del nazismo en señal de contrición y solidaridad con las víctimas judías y que ascendiera en peregrinaje a la Tierra Santa, en el Estado de Israel», evocó Tenembaum.
La Fundación Wallenberg viene llevando a cabo en los últimos años una vasta labor de investigación histórica destinada a revelar la importante labor humanitaria que llevara a cabo monseñor Roncalli, y recientemente ha instituido una medalla en su honor.
«Este premio no puede tener mejor primer receptor que el distinguido intelectual Marco Roncalli, hombre de letras y de prensa a quien reconocemos y humildemente tratamos de estimular con esta distinción», afirmó Tenembaum.
«Marco Roncalli cumple con su doble labor siendo fiel a la verdad histórica y a los preceptos del periodismo, llevando al público la mejor versión de la verdad posible así como documentando los hechos de la realidad cotidiana con singular precisión y celo investigativo».
La medalla fue entregada por Jesús Colina, director de la agencia de noticias Zenit.
En sus palabras, Marco Roncalli reconoció la contribución que ofrece la Fundación Wallenberg «Al trabajo de reconstrucción histórica sobre la actitud y las acciones de monseñor Angelo G. Roncalli a favor de los judíos perseguidos por el nazismo, sobre todo cuando se encontraba en Turquía, y antes aún en Bulgaria».
Este trabajo, reconoció Roncalli, le ha estimulado a ampliar su obra de investigación histórica para individuar «Justos entre las gentes», es decir, personajes reconocidos por el Comité Yad Vashem de Jerusalén que llegaron a perder o arriesgar la vida para ayudar a judíos en los momentos de la persecución.
El escritor dio las gracias en nombre de la Familia Roncalli y del pueblo Sotto il Monte (donde nació el Papa) a la Fundación Internacional Raoul Wallenberg por la ingente obra de recogida de documentación histórica que ha realizado para comprender esta labor del arzobispo Roncalli.