MADRID, martes, 18 noviembre 2008 (<a href=»http://www.zenit.org/»>ZENIT.org).- Está en marcha una campaña de firmas contra que el aborto sea declarado derecho humano por la ONU, tal como se propone un ‘lobby’ abortista, en el 60 aniversario de la creación de organización internacional en 1948.
Según informa a ZENIT, Elsa Yolanda Márquez Reyes, una de las promotoras, se ha organizado una campaña de recogida de firmas «para evitar que la ONU declare el aborto un derecho humano». «Seamos la voz de los que no tienen voz», afirma.
Los impulsores de la campaña, organizaciones pro familia y pro vida, afirman que, con motivo de que el próximo 10 de diciembre se celebra el 60 aniversario de la Declaración de los Derechos Humanos, el ‘lobby’ abortista está intentando pasar como derecho humano el aborto, llamándole derecho a la vida (de la madre).
Desde todo el mundo se están haciendo llegar firmas para impedirlo. En inglés ya tienen más de treinta mil firmas. En español no llegan a siete mil firmas.
Todas las firmas se presentarán en la sede de Naciones Unidas el mismo 10 de diciembre y se espera que sean más de cien mil.
La campaña la lidera C-FAM, una organización fundada en 1997 para hacer un seguimiento e influir en el debate sobre políticas sociales en Naciones Unidas y otras instituciones internacionales.
Es un instituto de investigación no partidista, sin ánimo de lucro, dedicado a restablecer una comprensión ajustada del derecho internacional, proteger la soberanía nacional y la dignidad de la persona humana.
El módulo a firmar, en numerosos idiomas, recuerda que la Declaración Universal es el logro de un estándar común para todas las personas y todas las naciones, e indica que se debe dar apropiada consideración a: el derecho a la vida de cada ser humano, desde su concepción hasta su muerte natural, teniendo cada niño o niña el derecho a ser concebido, nacido y educado dentro de su familia, basada en el matrimonio de un hombre y una mujer, siendo la familia el grupo de unidad natural y fundamental de la sociedad; el derecho de cada niño o niña a ser educado por sus padres, quienes tienen la prioridad y derecho fundamental a elegir el tipo de educación que se les dará a sus hijos.
Por eso el firmante solicita a todos los gobiernos interpretar de manera apropiada la Declaración Universal de los Derechos Humanos dado que: Todas las personas tienen el derecho a la vida, la libertad y la seguridad personal (Artículo 3); Los hombres y mujeres en edad madura, sin ninguna limitación debido a su raza, nacionalidad o religión, tienen derecho a contraer matrimonio y a establecer una familia. (Artículo 16); La familia es el grupo de unidad natural y fundamental de la sociedad y tiene derecho a protección por parte de la sociedad y el estado (Artículo 16); La maternidad y la niñez da derecho a asistencia y cuidados especiales (Articulo 25); Los padres tienen el derecho prioritario a elegir el tipo de educación que se les dará a sus hijos (Articulo 26).
Para más información: http://www.c-fam.org/publications/id.97/default.asp