CIUDAD DEL VATICANO, viernes, 24 abril 2009 (ZENIT.org).- El viernes por la tarde Benedicto XVI recibió al secretario general de la Liga de los Estados Árabes, Amre Moussa, quien este jueves había firmado un Memorándum de Entendimiento con la Santa Sede.
Una nota de prensa emitida por la Santa Sede explica que el representante árabe había mantenido también encuentros con el secretario para las Relaciones con los Estados de la Santa Sede, el arzobispo Dominique Mamberti.
"En el curso de los cordiales coloquios se ha subrayado la importancia del Acuerdo que busca favorecer una colaboración cada vez mayor entere las dos partes a favor de la paz y de la justicia en el mundo", explica la Santa Sede.
"Particular importancia se ha dado al papel del diálogo intercultural e interreligioso", subraya la nota emitida por la Oficina de Información de la Santa Sede.
En los encuentros con el secretario de la Liga Árabe se ha dado también, revela el Vaticano, "un intercambio de ideas sobre la situación internacional, en particular en Oriente Medio, y sobre la necesidad de encontrar una justa solución al conflicto entre israelíes y palestinos, y a los demás conflictos que entristecen la región".
El arzobispo Michael Fitzgerald, nuncio apostólico en Egipto y delegado de la Santa Sede ante la Organización de la Liga de los Estados Árabes, revela que este documento "indica dos campos de cooperación en el ámbito de la política".
En primer lugar, "la búsqueda de la paz, especialmente esto interesa a la Santa Sede, y también a la Liga Árabe, que hizo mucho por la mediación, en particular durante la guerra en Irak".
En segundo lugar, "la cooperación cultural, el diálogo de las culturas, el diálogo de la civilización y también el diálogo interreligioso, que se puede realizar con la Liga Árabe, pues tiene un departamento para la cultura".
"Ahora, con el Memorándum de Entendimiento, tenemos que tratar de ver lo que podemos hacer y qué contribución podemos dar juntos", añade el prelado británico en declaraciones a Radio Vaticano.
"Creo que la Liga Árabe aprecia muchísimo las declaraciones del Santo Padre", y el arzobispo además que "tiene en cuenta también la situación de los cristianos en los países árabes para el bien de la paz y del desarrollo en la región".
La Liga de Estados Árabes, con sede en El Cairo, fue fundada en 1945 para defender los intereses de las naciones árabes. Forman parte de ella 22 países, entre ellos Egipto, Jordania, Iraq, Líbano, Arabia Saudí, Yemen, Siria, Sudán, Marruecos, Túnez, Kuwait y Argelia.