BOMBAY, domingo 18 de octubre de 2009 (ZENIT.org).- Unos 1.500 delegados, incluidos más de cien obispos, centenares de sacerdotes y monjes y dirigentes laicos de 160 diócesis de la India han participado en el primer congreso misionero que se celebra en el país.
Bajo el lema, «Deja tu luz brillar», el Congreso se ha celebrado del 14 al 18 de octubre en el Colegio San Pío, de Goregaon, una localidad suburbana de Bombay.
El embajador del Vaticano en India y representante del Papa, el arzobispo Pedro López Quintana inauguró el Congreso este miércoles, informó la Conferencia Episcopal de la India.
El prelado destacó que «la misión de la Iglesia es propagar la esperanza continuamente» y aseguró que «la Iglesia no trabaja para hacer valer su poder o dominio, sino únicamente para servir a la humanidad, especialmente a los pobres».
La sesión inaugural empezó con una procesión en la que representantes de las Iglesias de los tres ritos llevaban la Biblia. Uno de ellos encendió una luz al son de cánticos e himnos sobre el tema de la luz.
El presidente del Congreso Misionero, el cardenal Oswald Gracias, pronunció unas palabras de bienvenida y destacó su deseo de que el encuentro proporcione a cada una «una comprensión más profunda de nuestra misión como discípulos de Cristo».
También intervino el presidente de la Conferencia Católica de Obispos de la India y cabeza de la Iglesia Syro-Malabar, el cardenal Varkey Vithayath, que animó a los participantes a dar un valiente testimonio de Cristo, ya que no hay sustituto a la Buena Nueva de Cristo para la felicidad.
Ninguna riqueza o placer en este mundo pueden dar la alegría profunda y duradera que da Cristo, afirmó.
No sólo mensajeros
El cardenal Varkey Vithayath destacó la importancia de los medios de comunicación en la proclamación de este mensaje, aunque destacó la necesidad de que los cristianos se conviertan no sólo en mensajeros, sino en el mensaje de un auténtico seguimiento de Cristo.
Añadió que ni Jesucristo, ni la Iglesia Católica, fuerzan a nadie a convertirse, y destacó la necesidad de rechazar la intolerancia con la fe de los demás.
Por su parte, el jefe de la Iglesia siro-católica Malankara en la India, el arzobispo Moran Mar Baselios Mar Cleemis, afirmó que el de Jesucristo es un mensaje de paz y amor para todo el mundo, y no para un único grupo étnico, lingüístico o regional.
También destacó que la Iglesia en la India es pequeña en comparación con otros grupos religiosos, pero su servicio que se extiende a todos los sectores de la población, con un particular compromiso con los pobres, es una importante contribución a la nación.
En el acto, los cristianos de Orissa, que fueron duramente perseguidos el año pasado, fueron propuestos como ejemplo de cristianos con coraje para llevar a cabo la misión evangelizadora.
El Congreso ha incluido conferencias, exhibiciones, actividades culturales, celebraciones litúrgicas, testimonios sobre nuevos y creativos caminos que algunos sacerdotes están llevando a cabo en el país y oraciones en los tres ritos de la Iglesia en India.
El evento se ha inspirado en la llamada del Papa Juan Pablo II a celebrar un Congreso Misionero continental.
También ha seguido la estela del Congreso Misionero Asiático que se celebró en Tailandia en el año 2006, en el que participaron cincuenta delegados de India, que sintieron que la India debía organizar un evento similar para su propio país.
El cardenal Oswald explicó que «el Congreso es una celebración de los dos mil años de historia de la Iglesia en India» y «una llamada a la renovación de nuestro camino de fe».