ROMA, jueves 29 de abril de 2010 (ZENIT.org).- Una puerta abierta entre el Vaticano y el mundo de las comunicaciones sociales: así definió el padre Federico Lombardi la Oficina de Información de la Santa Sede.
Lo hizo al intervenir este miércoles en el congreso Church and communications. Identiti and dialogue. (Iglesia y comunicaciones. Identidad y diálogo n.d.r.), celebrado hasta ayer y durante tres días en la Universidad Pontificia de la Santa Cruz, en Roma.
Según informó Radio Vaticano, el portavoz vaticano explicó que la comunicación de la Santa Sede va en dos sentidos.
“Comunicamos textos, informaciones, documentos de la Santa Sede al mundo de las comunicaciones, pero recibimos también preguntas, buscamos entender problemas e interrogantes, para proponer a nuestros superiores en la Santa Sede cuestiones que afrontar, respuestas que dar a las preguntas”.
El sacerdote jesuita reafirmó la importancia de una relación serena, objetiva y distendida con los periodistas.
“Nunca puedo decir que los medios son malos. Me parece un grave error. Sé que los medios reflejan muchas posiciones y actitudes diversas, y también muchas capacidades profesionales que entran en diálogo conmigo, que para mí interpretan las expectativas del gran público”.
Reafirmando el valor de una fuente de confianza, el padre Lombardi recordó la necesidad de una mayor transparencia en la comunicación de la Iglesia.
Y pidió “dar siempre la máxima información que podemos y sabemos dar, de manera que se reduzca la impresión que muchos tienen, de que nosotros tenemos una cultura del secreto o de las cosas que esconder”.
El director de la Oficina de Información Sobre se refirió en concreto al problema de los abusos a menores cometidos por algunos religiosos.
“Creo que es una cuestión que no se va a cerrar o a olvidar, y creo que es nuestra tarea lograr hacer evolucionar la comunicación en la Iglesia y en la sociedad que nos rodea en una dirección más positiva”.
El padre Lombardi recordó finalmente las citas más relevantes de la actividad pontificia de los próximos meses, entre ellas el viaje de Benedicto XVI a Inglaterra, previsto para septiembre, durante el cual el Papa asistirá a la beatificación del cardenal John Henry Newman.
“Es muy interesante -dijo-. Esto evidentemente significa que la figura de Newman tiene un especial interés para el Santo Padre, también porque es el evento fundamental de este viaje, que evidentemente deseaba hacer y consideraba oportuno hacer”.