CIUDAD DE MÉXICO, sábado, 12 de junio de 2010 (ZENIT.org).- Publicamos el mensaje que ha emitido el encuentro sobre «Catequesis inculturada» que ha emitido la Sección de Pueblos Originarios con el Departamento de Misión y Espiritualidad del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM) celebrado del 7 al 11 de junio.
CONSEJO EPISCOPAL LATINOAMERICANO
Sección de Pueblos Originarios,
con el Departamento de Misión y Espiritualidad.
Ciudad de México, del 7 al 11 de junio de 2010
ENCUENTRO SOBRE CATEQUESIS INCULTURADA
MENSAJE
Obispos, Secretarias y Secretarios Ejecutivos de las Comisiones Nacionales de Catequesis y de la Pastoral de Pueblos Originarios, nos hemos reunido en la ciudad de México, procedentes de Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Costa Rica, Panamá, México y secretarios de los departamentos del CELAM, en atención a la convocatoria de Monseñor Rodolfo Valenzuela, Obispo de la Verapaz – Guatemala y Responsable de la Sección de Pueblos Originarios del CELAM, junto con el Departamento de Misión y Espiritualidad.
En esta ocasión compartimos como tema central «La Catequesis Inculturada» en tres momentos: El primer momento fue para compartir experiencias de Catequesis Inculturada; momento que nos dio una gran riqueza; el segundo momento, una iluminación y profundización sobre «la Inculturación, una mirada desde la pastoral indígena»; «Catequesis Inculturada», «Jesucristo, símbolos, mitos y ritos indígenas» y «Criterios doctrinales y pedagogía para una catequesis inculturada». El tercer momento, fue para señalar propuestas para inculturar mejor el Evangelio.
El encuentro se desarrolló en un ambiente de fraternidad, oración, diálogo, libertad, responsabilidad, alegría y esperanza. Constatamos que hay una diversidad de experiencias, y que urge formar cristianos maduros, que siguiendo a Cristo seamos misioneros en nuestros ambientes, para hacer más y más presente el evangelio en nuestra manera de pensar, sentir y actuar, en la doble fidelidad que supone la verdadera inculturación: a Dios y a nuestras culturas.
Subrayamos algunos aspectos sobre la inculturación y catequesis inculturada que debemos tener muy presentes:
La importancia de la cultura en la vida de nuestros pueblos, favoreciendo una pastoral encarnada, que entiende y se hace entender (lenguaje simbólico), para hacerle espacio al Dios de la vida en nuestra comunidad.
El respeto y acompañamiento que supone este proceso: capacidad de escucha y amor efectivo a las culturas.
Favorecer la formación de los laicos y acompañarlos en su misión, para que sean ellos los animadores de la inculturación del Evangelio en su realidad.
Hacer memoria de tantos hermanos que han dado su vida por la fe en Cristo y fortalecer a quienes ya están en el servicio.
Ser testigos de Cristo Jesús y su Evangelio en nuestra comunidad.
La capacidad de saber ser, estar y acompañar al pueblo en su encuentro con Cristo.
Servirnos de los medios que la postmodernidad nos ofrece: radio, televisión, prensa, internet, comunicación de todo género, para que Cristo sea más y más conocido.
Favorecer el compromiso social, que verifica la autenticidad de nuestra fe en Él.
Qué proponemos para que en nuestras iglesias se avance hacia una catequesis inculturada, sobre todo en los pueblos originarios:
1. Catequesis y pastoral indígena tienen que trabajar muy en comunión.
2. Todos tenemos que empeñarnos en la formación permanente e integral.
3. Empeñarnos en la valoración de las culturas.
A LOS OBISPOS: Que donde no hay comisión de pastoral indígena, la constituyan y pronto. Que la próxima reunión del SEDAC, Mons. Rodolfo Valenzuela informe a los obispos de América Central del camino de la pastoral indígena y les haga la propuesta de hacer una comisión de esta Región Centroamérica.
Que los obispos se sientan responsables de la pastoral indígena y la acompañen en sus diócesis. Que se planee el trabajo con y desde las diferentes culturas que hay en ellas.
Que en la formación de los seminaristas tenga como prioridad la pastoral indígena, y que vivan su experiencia pastoral en las comunidades.
Que puedan discernir bien qué sacerdotes son aptos para servir a los pueblos indígenas, y a quienes quieran gastar su vida en esos campos, los preparen y envíen para que vivan su vocación.
Que la diócesis asegure recursos económicos a los sacerdotes que están en parroquias indígenas, de manera que ninguna parroquia se cierre por falta de los mismos.
AL CELAM: Constatamos que ha ido asumiendo un creciente papel protagónico; le pedimos que siga fomentando los encuentros regionales. La enorme variedad cultural pide acompañar las diferencias.
Que el ITEPAL ofrezca a los agentes de pastoral una preparación específica en el campo de la pastoral indígena.
La Amazonía pide una acción explícita que responda a sus urgencias pastorales. Que se forme una comisión para esa zona.
A LOS SACERDOTES:
+ Que tengan una formación integral y permanente.
+ Que valoren la cultura de la comunidad y se empeñen en aprender el idioma que ahí se habla.
+ Que vivan un estilo austero de vida y sean testigos de Cristo pobre y servidor.
+ Que los sacerdotes indígenas reconozcan en su identidad, valoren su cultura y vivan al servicio de sus comunidades.
+ Que trabajen en comunión con otros sacerdotes y agentes de pastoral.
+ Que los que trabajan en la pastoral indígena, puedan permanecer un tiempo suficiente,
para dar continuidad a los procesos.
+ Que el sacerdote enviado al campo indígena valore esta oportunidad y la viva lo mejor posible.
+ Que trabaje en la comunidad favoreciendo las vocaciones autóctonas.
+ Que sepa favorecer el protagonismo de laicos autóctonos y los acompañe en su formación.
A LAS RELIGIOSAS Y RELIGIOSOS:
+ Que sean testigos de Cristo pobre y servidor entre sus hermanos.
+ Que se empeñen en aprender el idioma del lugar y permanezcan un suficiente tiempo para favorecer procesos.
+ Que aprendan a trabajar en comunión con el párroco y con los agentes de pastoral.
+ Que sean testigos de Cristo servidor: austeridad y coherencia.
+ Que trabajen por una evangelización integral y no se limiten sólo a la promoción social.
+ Que se integren al plan pastoral de la diócesis, de la parroquia y le den prioridad en su servicio.
+ Que se reconozcan en su identidad, si son indígenas, y la vivan al servicio de sus comunidades.
+ Que se empeñen en su formación permanente.
A LOS Y LAS CATEQUISTAS:
+ Que se empeñen en su formación permanente.
+ Que valoren su vocación y la vivan.
+ Que se sientan dentro del trabajo diocesano y parroquial.
+ Que su servicio favorezca el crecimiento del número de catequistas.
+ Que sean los sujetos de la inculturación del Evangelio en sus comunidades; que se reconozcan hijos de su cultura.
Esperamos que este encuentro nos ayude a las Iglesias locales de nuestra región y especialmente a nuestros obispos, para lograr una mayor sensibilidad hacia nuestros hermanos indígenas, que se traduzca en acciones pastorales coordinadas, en su favor.