CASTEL GANDOLFO, domingo, 12 de septiembre de 2010 (ZENIT.org).- Benedicto XVI pidió a creyentes de todo el mundo este domingo que le acompañen con la oración con motivo de la peregrinación apostólica que realizará del 16 al 19 de septiembre al Reino Unido, una de las más esperadas de este pontificado.
Al concluir su intervención con motivo del Ángelus este domingo, el Santo Padre aseguró que el principal objetivo de su viaje será la beatificación del cardenal John Henry Newman, gran teólogo por el que Joseph Ratzinger siempre sintió un particular interés.
«Pido a todos que me acompañen con la oración en este viaje apostólico. A la Virgen María, cuyo nombre santísimo es celebrado hoy en la Iglesia, encomendamos nuestro camino de conversión a Dios», añadió.
En un análisis realizado en el editorial del último número del semanario «Octava Dies» del Centro Televisivo Vaticano, el padre Federico Lombardi S.I., portavoz vaticano, recuerda que el próximo jueves el Papa volará a Edimburgo «para iniciar, acogido oficialmente por Su Majestad la Reina Isabel, uno de los viajes más esperados de su pontificado».
«El miércoles pasado el Papa manifestó su gratitud por la invitación recibida, porque tiene conocimiento del compromiso y de la atención con la que no sólo Su Majestad y el Gobierno, sino también el primado anglicano -arzobispo de Canterbury-, y naturalmente toda la Iglesia católica en Inglaterra, Gales y Escocia, preparan los numerosos encuentros previstos».
«También las expectativas y el interés en la sociedad británica van creciendo, más allá de algunas ruidosas, pero siempre marginales manifestaciones de disenso», sigue aclarando el padre Lombardi.
«Se confirma en efecto la percepción de que la gran autoridad religiosa y moral del Papa podrá ofrecer una contribución específica importante, serena, positiva y constructiva, de orientación para los grandes desafíos del mundo de hoy», subraya el director de la Oficina de Información de la Santa Sede.
«Ciertamente, el encuentro del Papa con los más altos representantes de las instituciones y de la sociedad civil en la histórica Westminster Hall representará uno de los momentos culminantes del viaje», añade.
Pero, según Lombardi, «será en la beatificación del cardenal Newman que el mensaje de esta visita alcanzará pleno sentido. Este inglés a quien el Papa ha definido ‘verdaderamente grande’, rico de ‘amable sabiduría’ y ‘ejemplo de integridad y santidad de vida’, que con sus escritos y sus obras es fuente de inspiración para la Iglesia y la sociedad en tantas partes del mundo, encarna en el modo más convincente el fruto fascinante de la síntesis profunda entre la fe cristiana y el espíritu británico y su permanente fecundidad para el mundo de hoy y de mañana».
