REGGIO CALABRIA, jueves 14 de octubre de 2010 (ZENIT.org).- Benedicto XVI ha abogado por una nueva generación de políticos católicos «sin complejos de inferioridad», en un mensaje enviado este jueves a la 46ª Semana Social de los Católicos Italianos.
En la misiva que fue leída ante los congresistas, en la localidad sureña de Reggio Calabria, el Papa considera que la actual crisis no es sólo económica, es también cultural, como lo demuestra la crisis demográfica que vive en particular Italia, la falta de respeto de la vida humana desde su concepción hasta su fin natural, de la dignidad de la persona, o la falta de salvaguarda del medio ambiente.
En este contexto, el obispo de Roma lanza «el llamamiento para que surja una nueva generación de católicos, personas interiormente renovadas que se comprometan en la actividad política sin complejos de inferioridad».
«Esta presencia, ciertamente, no se improvisa –aclara el Santo Padre–; es, más bien, el objetivo al que debe tender un camino de formación intelectual y moral que, partiendo de las grandes verdades en torno a Dios, al hombre y al mundo, ofrezca criterios de juicio y principios éticos para interpretar el bien de todos y de cada uno».
Por su parte, el pontífice alienta a la Iglesia en Italia a «empeñarse en la formación de conciencias cristianas maduras, es decir, ajenas al egoísmo, a la codicia de los bienes y al ansia de carrera y, en cambio, coherentes con la fe profesada, conocedoras de las dinámicas culturales y sociales de este tiempo y capaces de asumir responsabilidades públicas con competencia profesional y espíritu de servicio».
«El compromiso socio político, con los recursos espirituales y las actitudes que requiere, es una vocación alta, a la que la Iglesia invita a responder con humildad y determinación», concluye, encomendando a la Semana Social la tarea de proponer «una agenda de esperanza para el futuro del país».