CIUDAD DEL VATICANO, jueves 17 de febrero de 2011 (ZENIT.org).- Los presupuestos vaticanos para este año 2011, tanto el general de la Santa Sede como el de los servicios que gestiona la Gobernación del Estado, muestran “signos de recuperación”, aunque acusa las “incertidumbres” provocadas por la crisis económica y por el aumento de los gastos de gestión.
Así lo afirma un comunicado hecho público hoy, sobre el resultado de la reunión del Consejo de Cardenales, que se ocupa del estudio de los problemas organizativos y económicos de la Santa Sede, mantenida el martes y el miércoles de esta semana.
El Consejo, presidido por el Secretario de Estado, cardenal Tarsicio Bertone, dedicó estos dos días a examinar dos presupuestos, por un lado el de la Santa Sede, y por otro el de la Gobernación del Estado Ciudad del Vaticano, que van por separado.
En la reunión estuvieron presentes el prefecto para los Asuntos Económicos de la Santa Sede, cardenal Velasio De Paolis, y el contable general de la Prefectura, Stefano Fralleoni.
Por la Gobernación del Estado de la Ciudad del Vaticano, participaron el presidente, cardenal Giovanni Lajolo, y el secretario general, monseñor Carlo Maria Viganò, mientras que por la Administración del Patrimonio de la Sede Apostólica, estuvieron presentes el presidente, cardenal Attilio Nicora, y el secretario, monseñor Domenico Calcagno.
Según el comunicado vaticano, el primer presupuesto, referido a las instituciones de la Santa Sede, incluye a los organismos de la Curia Romana, la Cámara Apostólica y el área “mediática”, que abarca también la Libreria Editrice Vaticana.
Como en años anteriores, y dado que una partida importante del presupuesto de la Santa Sede va a los medios de comunicación (Radio Vaticano, L’Osservatore Romano y Centro Televisivo Vaticano), estuvieron presentes el padre Federico Lombardi, director general de Radio Vaticano, y Alberto Gasbarri, administrador.
El segundo presupuesto comprende las necesidades económicas y de gestión territorial del Estado Ciudad del Vaticano, y a los servicios propios del mismo (mantenimiento de las estructuras, por ejemplo).
El balance de ambos presupuestos muestra “claros signos de recuperación” económica, aunque “se resiente por las incertidumbres del sistema económico global”, y también por “el aumento de los gastos de gestión”.
Esto es evidente sobre todo para el primer presupuesto, el de la Santa Sede, “cuya fuente insustituible de financiación la constituyen las libres contribuciones de los fieles”, subraya el comunicado.
Por ello, los miembros del Consejo “han expresado una profunda gratitud por el apoyo que éstos dan, a menudo de forma anónima, al ministerio universal del Santo Padre, exhortándoles a perseverar en esta obra buena”.
El comunicado completo puede leerse en: www.zenit.org/article-38294?l=spanish