“Pasaporte de ciudadanía”, es el proyecto de solidaridad social que inicia este martes, dirigido a jóvenes y adolescentes en dificultad y por esto considerados en peligro de dependencia de drogas varias, como crack, además de otros tipos de dependencias como del alcohol.
Lo indica la página web de la JMJ Río 2013, precisando que el proyecto inicia en la zona sur de Río, en la playa de Copacabana, donde se realizarán algunos de los principales eventos de la Jornada Mundial de la Juventud.
El obispo de Río de Janeiro Orani Joao Tempesta, bendice este martes por la tarde el símbolo del proyecto social de la Jornada Mundial de la Juventud: un autobús equipado con instrumentos de educación y formación: una videoteca, ludoteca y biblioteca, con una zona internet con 10 ordenadores y una carpa externa. También estarán presentes los consejeros de la Pastoral del Menor de la Conferencia Episcopal de Brasil.
El espacio para películas tendrá videos cortos y lagometrajes, con el tema sobre la vida diaria de los menores, como el film 5X Favela. La sala de juegos servirá para la interacción, y en la sala de lectura los menores podrán dibujar. Y con los ordenadores serán incentivados a crear blogs.
“La Jornada Mundial de la Juventud –indicó la asistente social Regina Leao- quiere dejar un legado social, en la problemática de la dependencia de drogas. Estamos elaborando una acción en red para una obra complementaria eficaz. El autobús entra como una herramienta pedagógica que servirá de puerta de entrada para el tratamiento de estos menores”.
Se ocupan de los jóvenes acercados por varias instituciones un equipo de cinco profesionales. El autobús permanecerá en Copacabana aproximadamente un mes, y los tiempos podrían alargarse según las necesidades.
Los sellos de la JMJ ya están en correos
Ya están disponibles en las agencias de correos de Brasil los sellos de la 28 edición de la JMJ. La presentación se hizo el 23 de marzo, en la parroquia de Guaratiba, después de la santa misa.
“Así como la Iglesia, también los correos tienen la noble misión de aproximar personas de todas las partes del mundo”, indicó el representante de los Correos, Marcelo Rocha. Y añadió la contribución “por medio de la filatelia para realizar el objetivo del grandioso encuentro: divulgar entre los jóvenes la religión, incentivar la fe y atraer a los fieles”.
