«Ahlan Wa Sahlan! Bienvenidos al descubrimiento arqueológico más profundo de la Tierra, 385 metros bajo el nivel del mar, pero más cercano al cielo». Estas fueron las palabras del ingeniero Rustom Mkhjian, director de la Comisión de Jordania que supervisa el sitio donde Jesús fue bautizado.
Los trabajadores locales están trabajando frenéticamente para completar los preparativos para la inminente visita del papa Francisco, que comienza con una parada en el Reino Hachemita de Jordania. Mkhjian, que ha estado presente en cada visita papal desde la de san Juan Pablo II en el río Jordán en 2000, explica con entusiasmo la importancia de conservar el sitio como un lugar de peregrinaje para todos.
El sitio tiene una significado especial para las tres religiones monoteístas, no sólo es el lugar donde Jesucristo recibió el bautismo por manos de san Juan Bautista, sino también está muy cerca de donde la Escritura declara que el profeta Elías subió al cielo. Alrededor de la zona están los restos de cinco iglesias diferentes, una construida sobre la otra para marcar el lugar sagrado. Debido a los terremotos que azotaron la zona durante siglos, todo lo que queda son los marcos de la basílica original y varias áreas que fueron excavadas, revelando el mármol y piedras de las iglesias anteriores construidas allí.
«¡Esa es la gran pregunta!» ¿Por qué los cristianos insisten en la construcción de sus iglesias aquí, desafiando a las fuerzas de la naturaleza? Porque, según la Biblia, los peregrinos que vienen y los descubrimientos arqueológicos, este es el lugar donde el cristianismo comenzó a extenderse por todo el mundo».
Los restos de este sitio son frágiles, sin embargo, Mkhjian explica que una vez que los problemas de seguridad hayan desaparecido y los lugares arqueológicos estén protegidos y conservados de manera concluyente, espera que a los cristianos se les permitirá ser bautizados en el mismo lugar donde estaba Jesús.
Mkhjian añadió que «aquí su difunta Majestad [el rey Hussein] dijo algo importante: «el patrimonio pertenece a la humanidad. Este sitio pertenece a usted, a todo el mundo en la tierra. Pero los jordanos tenemos que protegerlo bien, con la esperanza de construir puentes de paz y de amor a la humanidad «
Durante la visita de Benedicto XVI a Jordania en 2008, Mkhjian tuvo el privilegio de conducir al papa emérito al lugar santo. Nos dice que él le dijo al Santo Padre su compromiso en la conservación del lugar «como Jesús y Juan lo vieron» .
«Queremos que las personas experimenten este evento sagrado.Estamos hablando de algo que va más allá del turismo», exclama. «Una gran cantidad de lugares sagrados han perdido su significado. No queremos un sitio turístico, sino más bien un lugar de peregrinación. Su Santidad el papa Francisco viene ahora como un peregrino a visitar el lugar donde Jesús fue bautizado y el cristianismo comenzó».
El Santo Padre se reunirá con un grupo de refugiados cerca del río Jordán. En este país, que está rodeado de zonas de conflicto como Siria y Palestina, ha recibido a miles de refugiados que huyen de la violencia en sus países de origen.
Mkhjian cree que la visita del Papa resaltará un mensaje crucial en el logro de la unidad en el Oriente Medio. «Nosotros, cristianos y musulmanes, vivimos aquí en armonía, juntos, desde que el Islam llegó aquí», señala. Aunque el 95 por ciento de la población es musulmana, los jordanos han vivido durante siglos en paz con los cristianos, un hecho que dará esperanza en todo el mundo de resolver de manera pacífica a los conflictos.
Este sitio hubiera quedado como una zona militar cerrada si no hubiéramos firmado el tratado de paz con Israel. Debido al tratado de paz, excavaciones y conservaciones en el lugar han conducido de importantes descubrimientos de las iglesias subterráneas a las células de ermitaños que rodean la zona.
«Considero la zona desde la colina de Elías hasta el lugar donde Jesús fue bautizado, el monasterio más grande abierto en la tierra», dice con una sonrisa. «Así que, Ahlan Wa Sahlan, eres bienvenido [aquí] otra vez».