En su viaje a Molise, siempre en la ciudad de Campobasso, después de la santa misa el papa Francisco se dirigió a la catedral en auto, para encontrar a los enfermos.
En la catedral, después de una ceremonia de adoración del Santísimo Sacramento se realizó un momento de oración ante la tumba de dos obispos, Alberto Romita (fallecido en 1939) y Secondo Bologna (arzobispo de 1940 al 1943, quien murió durante un bombardeo en 1943). Después el papa Francisco saludó a una representación de enfermos.
Hacia las 13 horas, almorzó con los pobres de la Cáritas inaugurando la mensa “Casa degli Angeli – Papa Francesco”, una nueva estructura de la diócesis destinada a los necesitados de la ciudad.
Después el Santo Padre fue al helipuerto en donde a las 14,30 partió hacia el santuario de Castelpetroso.