CIUDAD DEL VATICANO, viernes 17 de septiembre de 2010 (ZENIT.org).- El Papa Benedicto XVI ha viajado al Reino Unido “con valor y alegría”, y esta serenidad ya es un primer mensaje y ejemplo para los creyentes.
Así lo afirma hoy el director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Federico Lombardi, en el editorial de esta semana de Octava Dies, el semanario informativo del Centro Televisivo Vaticano.
A pesar de las anunciadas polémicas y oposiciones, el Papa sigue dando razón de la esperanza cristiana “con dulzura y respeto”, afirma Lombardi.
Refiriéndose al coloquio del Papa con los periodistas del vuelo papal, el portavoz vaticano explica que “a la pregunta de si estaba preocupado por las críticas y las oposiciones que le esperaban en el Reino Unido, respondió que no estaba preocupado, que seguía adelante con valor y con alegría”.
“Dijo que la Iglesia no debe preocuparse tanto de mostrarse fuerte y atractiva, como de transparentar totalmente la persona y las palabras de Jesucristo”. Si lo hace, “ha hecho su deber, ha llevado a cabo su misión, y no tiene algún motivo para tener miedo”.
Aquí, señala Lombardi, “está el sencillísimo secreto del Papa incluso en situaciones difíciles”. Esta serenidad “por sí misma ya es mensaje y ejemplo para los creyentes”.
“El secreto es, de hecho, la fe en Jesucristo”, añade el portavoz; una fe que el Papa “propone con inteligencia, con confianza y con alegría, sabiendo y respetando las preguntas y las dificultades de sus interlocutores”.
Según el padre Lombardi, el Papa, al evocar la figura del cardenal Newman, “pone de relieve su modernidad y su continua búsqueda de la verdad”.
Benedicto XVI “sabe bien que hoy el encuentro con Dios y con la fe cristiana no son fáciles y no deben darse por descontado”, y que “es necesaria una voz y una mano amiga que proponga con claridad y acompañe con amor a descubrir la belleza y el valor de la propuesta cristiana”.
Será escuchada o no esta propuesta, concluye Lombardi, “pero la prpuesta es bella: es lo mejor que el Papa puede ofrecer. Por eso la hace con alegría, y quien la acoge participa en esta alegría”.