CIUDAD DEL VATICANO, jueves, 25 enero 2007 (ZENIT.org).- La histórica visita a Benedicto XVI del primer ministro de la República Socialista de Vietnam, Nguyên Tân Dung, que tuvo lugar este jueves, ha sido calificada por la Santa sede como un «importante paso» hacia la normalización de las relaciones bilaterales».
Un comunicado de prensa emitido por la Oficina de Información del Vaticano tras el encuentro constata, además, que en los últimos años se están «abriendo mayores espacios de libertad religiosa para la Iglesia católica en Vietnam».
«Es la primera vez que un primer ministro de la República Socialista de Vietnam tiene un encuentro con el Santo Padre y con las más altas autoridades de la Secretaría de Estado», explica la nota vaticana para subrayar la importancia del encuentro.
La audiencia que el Papa concedió al primer ministro comunista en el Palacio Apostólico duró 25 minutos y concluyó con el intercambio de regalos: el Papa recibió del representante vietnamita un jarrón de cerámica, una pieza única realizada en el año 2000, y el Santo Padre le regaló las medallas del pontificado.
Dos intérpretes, así como el jefe de la Comisión vietnamita para los asuntos religiosos, Ngo Yen Thi, asistieron al encuentro a puertas cerradas.
Tras el encuentro con el Papa, el primer ministro se reunió con el cardenal Tarcisio Bertone, secretario de Estado, acompañado por el arzobispo monseñor Dominique Mamberti, secretario para las Relaciones con los Estados.
En el comunicado emitido tras la audiencia, la Santa Sede manifiesta «su complacencia por la visita, que marca un nuevo e importante paso hacia la normalización de las relaciones bilaterales».
«Estos últimos años han registrado progresos concretos, abriendo mayores espacios de libertad religiosa para la Iglesia católica en Vietnam», subraya el Vaticano.
«En el curso de los coloquios se analizaron los problemas todavía abiertos, esperando que se afronten y resuelvan a través de los canales de diálogo existentes y que lleven a una fecunda cooperación entre la Iglesia y el Estado, de manera que los católicos puedan dar siempre su contribución positiva al bien común del país, de la promoción de los valores morales, en particular con la juventud, con la difusión de una cultura de la solidaridad y con la asistencia caritativa a favor los más débiles de la población», aclara la nota informativa.
En los encuentro del primer ministro vietnamita con los representantes de la Iglesia «tuvo lugar un intercambio de opiniones sobre la actualidad internacional de cara a un común compromiso por la paz y por la solución negociada de los graves problemas del presente».
Por su interés publicamos el comunicado vaticano.
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En la mañana de este jueves, 25 de enero de 2007, el primer ministro de la República Socialista de Vietnam, el señor Nguyên Tân Dung, fue recibido en audiencia por el Santo Padre Benedicto XVI y se encontró sucesivamente con el cardenal Tarcisio Bertone, secretario de Estado, acompañado por el arzobispo monseñor Dominique Mamberti, secretario para las Relaciones con los Estados.
La Santa Sede manifestó su complacencia por la visita, que marca un nuevo e importante paso hacia la normalización de las relaciones bilaterales. Estos últimos años han registrado progresos concretos, abriendo mayores espacios de libertad religiosa para la Iglesia católica en Vietnam.
En el curso de los coloquios se analizaron los problemas todavía abiertos, esperando que se afronten y resuelvan a través de los canales de diálogo existentes y que lleven a una fecunda cooperación entre la Iglesia y el Estado, de manera que los católicos puedan dar siempre su contribución positiva al bien común del país, de la promoción de los valores morales, en particular con la juventud, con la difusión de una cultura de la solidaridad y con la asistencia caritativa a favor los más débiles de la población.
Además, tuvo lugar un intercambio de opiniones sobre la actualidad internacional de cara a un común compromiso por la paz y por la solución negociada de los graves problemas del presente.
Es la primera vez que un primer ministro de la República Socialista de Vietnam tiene un encuentro con el Santo Padre y con las más altas autoridades de la Secretaría de Estado.
[Traducción del original italiano realizada por Zenit]