CIUDAD DEL VATICANO, lunes, 8 agosto 2005 (ZENIT.org).- En la mañana de este sábado, el hermano del Papa Benedicto XVI, monseñor Georg Ratzinger, fue dado de alta del Policlínico Gemelli de Roma, donde ingresó en la noche del miércoles para que le fuera implantado un marcapasos tras haber experimentado problemas de corazón.
Monseñor Ratzinger, sacerdite de 81 años, fue acompañado por el secretario particular del Papa, monseñor Georg Gaenswein, a Castel Gandolfo, donde el Prelado está pasando unos días de vacaciones junto a Benedicto XVI, quien este viernes se desplazó desde la residencia veraniega papal al Policlínico para hacerle una visita.
El Santo Padre se dirigió a la habitación en la que se encontraba su hermano, en el décimo piso del centro, y luego acudió a la pequeña capilla situada en el tercer piso del hospital, donde también estuvo internado Juan Pablo II, en varios períodos de enfermedad y convalecencia.
Al salir del centro médico, acompañado por el arzobispo Leonardo Sandri, sustituto de la Secretaria de Estado y por el arzobispo James Harvey, prefecto de la Casa Pontificia, el Papa saludó a varios pacientes, al personal sanitario y a numerosos fieles que acudieron a ver al Pontífice.
Monseñor Georg Ratzinger fue internado en la clínica romana el pasado miércoles a causa de unas alteraciones del ritmo cardíaco y, tras una serie de análisis, el jueves le fue implantado con éxito un marcapasos.
El anciano sacerdote es maestro de Capilla en la Catedral de Ratisbona, localidad del sur de Alemania.