MADRID, 14 octubre 2002 (ZENIT.org).- Los grupos musulmanes que promuevan el maltrato de la mujer, la ablación femenina y la lapidación no tienen lugar en la sociedad española, según ha decidido la Comisión Islámica Española (CIE).
Hace un año esta institución ya expulsó de su organización a veinte grupos que hacían apología de los malos tratos. Ahora propone la expulsión de 140 grupos de esta índole.
La CIE proyecta denunciar a los grupos que hagan apología de la violencia doméstica y ponerlos en manos de la justicia.
Primero, los expulsará de la propia Comisión, y posteriormente procurará que se les excluya del registro de entidades religiosas.
El objetivo es erradicar de la sociedad española cualquier grupo musulmán que vulnere los derechos humanos.
Esta entidad española quiere que conste la posición del Islam en relación a los malos tratos a la mujer, antes que se cierre la elaboración de la ley que en España contempla la problemática de la violencia doméstica.
La noticia llega en el mismo momento en qué en Barcelona se retoma el juicio contra el imam de la mezquita de Fuengirola, Mustafa Kamal, acusado de alentar el castigo corporal a la mujer. Kamal es el autor del libro «La mujer en el islam», un capítulo del cual, «Pegar a la mujer», especifica los métodos para pegar a la mujer sin dejar rastro.
Según El Mehdi Flores, secretario de la Federación Española de Entidades Religiosas Islámicas (FEERI), «el que pega a su mujer no sigue la senda de Muhammad».
Flores, convertido al islam, que se ha ofrecido para explicar al juez del caso Kamal que «el Islam no permite ni ha permitido jamás maltratar a la mujer», es partidario de expulsar de la Comisión Islámica Española todo grupo que practique la violencia.
