Nuevo presidente de la Conferencia Episcopal de Estados Unidos

Monseñor William Skylstad, obispo de Spokane

Print Friendly, PDF & Email
Share this Entry

WASHINGTON, miércoles, 17 noviembre 2004 (ZENIT.org).- Los obispos católicos de Estados Unidos eligieron este lunes, como nuevo presidente de la Conferencia Episcopal a monseñor William Skylstad, obispo de Spokane, para un periodo de tres años.

El mismo día, el cardenal Francis George, arzobispo de Chicago, fue elegido por tres años como vicepresidente.

Monseñor Skylstad, 70 años, anterior vicepresidente, sucede a monseñor Wilton Gregory de Belleville, Illinois, como presidente. Los dos obispos habían ocupado estos cargos desde el 13 de noviembre de 2001.

Monseñor Skylstad fue elegido presidente en la primera vuelta de las elecciones, en la reunión semestral de los obispos que ha tenido lugar en esta ciudad.

William Skylstad nació en Omak, Washington. A inicios de este año, recordó: «Nuestra familia vivió en una zona no muy católica. Durante mis años escolares no tuve compañeros católicos. Cuando estaba acabando, sentí una fuerte llamada a ser sacerdote. No me preguntéis por qué. Nadie me había sugerido tal posibilidad… Sólo en los últimos años me he dado cuenta del poder del Espíritu Santo en nuestras vidas».

Skylstad estudió en el pontificio colegio Josephinum en Worthington, Ohio. Fue ordenado sacerdote el 21 de mayo de 1960. Tras la ordenación, fue asignado como profesor al Seminario de la diócesis de Spokane.

Después de esta etapa como educador y administrador en el Seminario, fue nombrado párroco de una comunidad católica en aumento en la ciudad de Spokane. Fue nombrado obispo de Spokane el 31 de marzo de 1990.

En su discurso de despedida a la asamblea de la Conferencia Episcopal, monseñor Gregory reconoció que el escándalo suscitado durante su mandado a causa de los abusos sexuales atribuidos a sacerdotes es probablemente el más grande de la historia de la Iglesia en Estados Unidos.

Añadió que los obispos están comprometidos en la revisión de las políticas para afrontar el problema y mantener la promesa de garantizar un ambiente seguro para los niños, así como de promover la reconciliación con las víctimas.

Monseñor Skylstad alentó a sus hermanos en el episcopado a tener confianza: «Parece fácil dejarse atemorizar por los desafíos, pero trabajando juntos podemos mirar al futuro con alegría y esperanza».

La semana pasada, el obispo Skylstad había anunciado que su diócesis pretende declarar la bancarrota al final de mes, a causa de los daños y perjuicios sufridos a raíz de los casos de abusos sexuales atribuidos a sacerdotes.

En la liturgia de apertura de su asamblea de otoño los obispos celebraron también el vigésimo quinto aniversario de la carta pastoral con la que confirmaban que el racismo es un pecado.

Print Friendly, PDF & Email
Share this Entry

ZENIT Staff

Apoye a ZENIT

Si este artículo le ha gustado puede apoyar a ZENIT con una donación