CIUDAD DEL VATICANO, 7 agosto (ZENIT.org).- A partir de este último sábado han comenzado a llegar a Roma miles de voluntarios de la Jornada Mundial de la Juventud. En total, serán 25 mil personas que se pondrán al servicio de los jóvenes peregrinos como «ángeles custodios». Del 15 al 20 de agosto, se encargarán de garantizar la acogida y de la organización logística de las actividades en las que en total participarán al menos un millón de chicos y chicas.
Los «ángeles» de estas Jornadas Mundiales de la Juventud proceden de 40 países de todos los continentes. Vivirán su propia jornada jubilar el próximo 12 de agosto, cuando participarán en una eucaristía en la plaza de San Pedro, celebrada por el cardenal vicario de Roma, Camillo Ruini. Al final, atravesarán juntos la Puerta Santa. En ese momento, comenzarán nueve días frenéticos de trabajo.
Massimo Orselli, responsable del sector voluntariado del Comité para la Jornada Mundial de la Juventud, explica que para el 8 de agosto habrán llegado ya 18 mil voluntarios. Estos muchachos se distribuirán por las estaciones ferroviarias, peajes de autopistas, aeropuertos, estacionamientos de autobuses…, para recibir a los jóvenes e indicarles su lugar de residencia. Allá también serán acogidos por otros voluntarios que se encargarán de resolver cuestiones prácticas. Gracias a la colaboración de estos chicos y chicas, podrán hacerse realidad los grandes encuentros con el Papa que tendrán lugar en la explanada de Tor Vergata –cientos de miles de jóvenes pasarán la noche final al aire libre en ese lugar situado a las afueras de Roma–.
Los voluntarios son dirigidos por ochocientos responsables de equipo, también ellos voluntarios, que fueron formados en un cursillo que se organizó a inicios de mayo en la ciudad italiana de Fiuggi.