El representante vaticano ante la sede de la ONU de Ginebra, el arzobispo Giuseppe Bertello, intervino esta mañana ante la sesión extraordinaria de la Comisión que se ha convocado por petición de los países de la Liga Árabe para discutir sobre la situación de los territorios ocupados. En el encuentro de la comisión participan más de 50 delegaciones nacionales que buscan encontrar una posición común ante la peligrosa situación que atraviesa la región.
Monseñor Bertello pidió que se adopten decisiones políticas rápidas, capaces de establecer un clima de confianza entre los pueblos de una tierra considerada como «santa» y en la que hunden sus raíces espirituales las tres religiones monoteístas más importantes: el cristianismo, el islam y el judaísmo.
«Derechos fundamentales, como los de tener un Estado y un gobierno independiente, el derecho a la seguridad y a la libre expresión de la propia cultura e historia son todavía por desgracia ausentes –añadió el prelado– y sólo su cumplimiento podrá ayudar a la reconstrucción de la paz»