MADRID, 26 nov (ZENIT.org).- En su habitual alocución dominical en la cadena radiofónica Cope, el cardenal Antonio María Rouco aseguró ayer que todos los obispos de España se han sumado a las duras palabras de condena del terrorismo a ETA que él pronuncio como presidente de la Conferencia Episcopal en la asamblea plenaria celebrada la semana pasada.
El arzobispo de Madrid había calificado el terrorismo como «nuestro más grave problema», que «atenta vilmente contra el más sagrado e inviolable de los derechos de la persona humana: el derecho a la vida; contra la verdad y la libertad de las personas y de los grupos, y, por tanto, contra los fundamentos de la convivencia social. El terrorismo es la mayor de las negaciones de la justicia y de la caridad: una gravísima inmoralidad».
«No admite cobertura ideológica alguna», añadió. De modo que «Una sociedad cercana a Dios no dejará espacio al terrorismo ni a sus causas».
«Es necesario que los creyentes, pastores y fieles, nos preguntemos, sin rehuir responsabilidades, si hemos aportado cuanto estaba en nuestras manos para llevar a cabo la necesaria conversión moral y espiritual que permita -con la colaboración de todos- la superación y la erradicación del terrorismo».
«Evangelizar hoy en España –añadió– incluye el imperativo de hacer ver la necesidad del camino de la conversión a Cristo ´realizando la verdad en el amor´. Una sociedad cercana a Dios no dejará espacio al terrorismo ni a sus causas».
«En este contexto de conversión y renovación cristianas –concluyó–, hemos dispuesto que en todas las diócesis de España se incluyan desde ahora mismo en todas las celebraciones litúrgicas y especialmente en las de la Eucaristía, preces de los fieles por el cese de todas las acciones terroristas y por la paz».
Además, apuntó que en cada diócesis «se propondrá e impulsarán otras iniciativas pastorales con esta misma intención: la superación y erradicación del terrorismo».