CIUDAD DEL VATICANO, 8 ene 2001 (ZENIT.org).- El papa Juan Pablo II continuará ejerciendo su labor al frente de la Iglesia con la misma pasión que durante el Año Santo que acaba de concluir. Lo afirma hoy el portavoz de la Santa Sede en una entrevista concedida a la agencia de noticias española EFE.
Joaquín Navarro-Valls, quien asegura que en los 17 años que lleva al lado del Papa «jamás le oí decir que se retiraría», ha desmentido indirectamente las informaciones aparecidas los pasados meses en algunos medios de comunicación europeos que aseguraban que el pontífice dimitiría una vez concluido el Jubileo de 2000 y se marcharía a su Polonia natal.
Navarro-Valls afirma que el obispo de Roma mantiene la misma ilusión que cuando llegó al Pontificado, que es muy tenaz y que cuando se le hace notar que alguna de las actividades previstas pueden cansarle y dañarle la salud, su respuesta es automática y no exenta de ironía: «ya tendré tiempo para descansar».
En ese contexto se explica su decisión de celebrar la pasada Misa del Gallo al aire libre en la plaza de San Pedro desafiando al frío y la lluvia que cayó esa madrugada sobre la Ciudad Eterna.
Cuando sus colaboradores le señalaron que la ceremonia duraría varias horas y que haría mal tiempo, su respuesta fue categórica: «si los fieles aguantan horas y horas en la plaza, ¿por qué yo voy a ser una excepción?».
Navarro subraya en sus declaraciones a EFE que el Papa está en buenas condiciones físicas, teniendo en cuenta sus 80 años y su historial clínico marcado por el atentado que sufrió y las diversas caídas y operaciones.
«En persona está mejor que la imagen que da por televisión, y es que, muchas veces, cuando le vemos por la pequeña pantalla, es tras una dura jornada, en la que se ha cansado y su rostro lo demuestra», explica el portavoz.
Preguntado sobre si el Vaticano «esconde» las enfermedades del pontífice, Navarro dijo que el 85 por ciento de sus actividades son públicas, con fotógrafos y cámaras de televisión captándole desde todos los ángulos, «y, por lo tanto, sería absurdo intentar esconder lo que está a la vista de todos».
Ante la pregunta si Juan Pablo II sigue gobernando la Iglesia, Navarro es categórico: «él decide».
Asimismo, respecto a si en el Vaticano existe la sensación de que se ha entrado en la recta final del pontificado, el portavoz también fue rotundo para negarlo.
«No existe esa sensación y, prueba de ello, es que el Papa sigue haciendo proyectos, escribiendo documentos y dando sorpresas», indicó.
Entre los proyectos, figura el ya confirmado viaje a Ucrania, en junio próximo.
Antes, en primavera, espera ir a Damasco, siguiendo las huellas de san Pablo, en un viaje que no está confirmado pero si en avanzado estado de preparación y que dependerá de la situación en Oriente Medio.
También están en preparación visitas a Armenia, Atenas y Malta, y en estudio un viaje a Oceanía, tal vez a Nueva Caledonia, para llevar en mano el documento final del sínodo de obispos para ese continente. Podría realizar, además, otro viaje a Brasil.
