AMBON, 8 mayo 2002 (ZENIT.org).- Los cristianos del archipiélago de las Molucas podrían verse obligados a huir en masa de la propia tierra como consecuencia de la ley marcial que algunos querrían imponer a la población, informa la agencia misionera Misna.
Lo ha declarado a la prensa local el obispo de Ambón, capital de las Molucas, monseñor Petrus Canisius Mandagi.
El prelado ha dicho que teme una especie de limpieza étnica si la aireada ley fuera «aplicada por un gobierno inmoral, injusto y corrompido, que pone las propias ambiciones por encima del bien común».
«En ese caso –añadió el obispo–, esperamos que se preparen amplias embarcaciones en la bahía de Ambón para transportar a la población fuera de las Molucas».
Mientras tanto, el vicepresidente de Indonesia, Hamzah Haz, volvió a asegurar que no se impondrá la ley marcial en el archipiélago, donde en los día pasados se reanudó la violencia dos meses después de la firma de un acuerdo de paz entre cristianos y musulmanes.
El vicepresidente hizo esta declaración durante el encuentro con los 45 miembros de la Cámara de Representantes de la provincia de las Molucas, llegados a Yakarta para discutir cuestiones relativas al conflicto interreligioso que dura ya tres años.
Hablando con Haz, los delegados subrayaron la necesidad de crear inmediatamente la prometida comisión de investigación independiente para indagar sobre todos los episodios de violencia que han tenido lugar en el archipiélago desde el 19 de enero de 1999.
La delegación, que el pasado día 6 de mayo se entrevistó también con el ministro de Bienestar Social Yusuf Kalla, tenía previsto encontrarse hoy con el ministro de Seguridad y Asuntos Políticos, Susilo Bambang Yudhoyono, con el jefe de la policía nacional Da´i Bachtiar, con el jefe del Ejército A. S. Widodo, y con el presidente del Parlamento, Akbar Tanjung.