Con este motivo, desde el 29 de abril hasta el 23 de mayo, han escogido Johannesburgo como sede de la reunión del Consejo general, que se celebra junto a los provinciales de África.

Los primeros cinco Oblatos llegaron a Pietermaritzburg, Sudáfrica, en 1852. El inicio estuvo marcado por las dificultades, sin embargo aquellos pioneros, como informa el boletín informativo de esta familia religiosa, contribuyeron decisivamente a la evangelización de lo que entonces era la vicaría apostólica de Natal, en la que ahora surgen cuatro provincias oblatas: Lesotho, Natal, Transvaal y la Provincial Central de Sudráfrica, con un total de 360 oblatos, entre los que se encuentran ocho obispos.

Estas provincias tienen misiones en Zimbabwe y Botswana. Actualmente en estos países de la región sudafricana, los Oblatos trabajan en la pastoral de los jóvenes y organizan retiros espirituales y actividades de formación, en colaboración con las organizaciones juveniles católicas, y de adultos laicos.

La celebración del aniversario prevé, además de la reunión del Consejo, una serie de ceremonias religiosas del 25 al 27 de mayo en Pietermaritzburg, Durban y peregrinaciones a otras localidades.