ROMA, 21 junio 2002 (ZENIT.org).- Acaba de regresar de Tierra Santa la delegación vaticana que ha entregado al «Caritas Baby Hospital» de Belén aparatos médicos donados por el Papa. La delegación se ha entrevistado con los presidentes israelí y palestino.
Formó parte del grupo el director de la Obra Romana de Peregrinaciones, monseñor Liberio Andreatta, quien viajó para presentar un proyecto de peregrinaciones en favor de la paz.
El martes la delegación tuvo un encuentro con el presidente israelí, Moshe Kazav; éste ha dado su apoyo al proyecto.
«Pedimos a grupos de unas veinte personas que vuelvan a Tierra Santa para transmitir con nuestra presencia el valor y la esperanza a la población –explica a su regreso monseñor Andreatta en declaraciones a Zenit–. A quien ya ha estado, le pedimos que vuelva para realizar un servicio a la paz. A quien no ha estado nunca le decimos que ahora es todavía más urgente ir para sacar de la desesperación a la población palestina e israelí».
«Por lo que se refiere a la seguridad de los peregrinos, las autoridades locales apoyan y sostienen nuestra propuesta», añade.
El miércoles, en Ramala, la delegación recibió la calurosa acogida de Yasser Arafat. El presidente de la Autoridad Palestina expresó su satisfacción por las peregrinaciones de paz y, como Premio Nobel, ha nombrado a Ernesto Olivero, fundador del Servicio Misionero Juvenil de Turín, su «embajador de paz».
Olivero se unió a la delegación para explicar a las autoridades israelíes y palestinas los motivos del encuentro internacional de jóvenes que promoverá en Belén y Jerusalén el 29 de septiembre. Un concierto de Andrea Bocelli, el famoso tenor invidente, ante miles de jóvenes dará voz al anhelo de paz que nunca se ha apagado a pesar de la cruda realidad.
