CIUDAD DEL VATICANO, 22 diciembre 2002 (ZENIT.org).- La Santa Sede ha manifestado su solidaridad a los obispos de Venezuela que en estos momentos tienen que afrontar la difícil situación que atraviesa el país dividido entre los opositores y los defensores del presidente Hugo Chávez.
El nuevo presidente del Consejo Pontificio para la Justicia y la Paz, el arzobispo Renato Martino, ha enviado un mensaje a los prelados venezolanos en el que aplaude el último llamamiento que dirigieron al país con el lema: «Evitemos la destrucción, construyamos la reconciliación» (13 de diciembre).
En la misiva a los prelados venezolanos, todo el Consejo Justicia y Paz desea que «el gobierno y el pueblo venezolano, especialmente cuantos tienen la responsabilidad de dar respuestas concretas y ofrecer alternativas para la solución del conflicto, dirijan su mirada y el corazón hacia Jesucristo, príncipe de la paz, para que puedan promover la reconciliación y proteger la unidad de Venezuela».
No hay que olvidar, subraya el arzobispo Martino, que «la paz requiere como condiciones irrenunciables la verdad, la justicia, el amor y la libertad, y que el problema de la paz, adecuadamente entendida, no puede prescindir de los principios morales ni puede separarse del respeto de la dignidad y de los derechos humanos, en primer lugar del derecho a la vida».