AWHUM, 2 abril 2003 (ZENIT.org).- El hermano Clement, monje de Nuestra Señora de Calvario en Awhum (Nigeria) fue asesinado por unos salteadores en la noche del 25 de marzo. Pertenecía a la Orden Cisterciense de la Estricta Observancia (Trapenses).
El misionero viajaba en el autobús nocturno de Lagos a Enugu. El vehículo fue atacado en alguna zona entre Onitsha y Awhum, hacia el final del trayecto.
El hermano Clement contaba poco más de 40 años «y era muy amado por todos –indica un comunicado de la OCSO–. Awhum y todos los monasterios de la región confiaron en él como su mecánico especialista”.
«Su muerte es causa de gran dolor para Dom Bertrand y la Comunidad de Awhum. Los hermanos Nsugbe han resultado también muy afectados por esta tragedia», añade la Orden.
