Concluye la fase diocesana del proceso de beatificación de Antoni Gaudí

BARCELONA, 9 mayo 2003 (ZENIT.org-VERITAS).- El martes 13 de mayo, el cardenal arzobispo de Barcelona, Ricard Maria Carles, presidirá la sesión solemne de clausura de la fase diocesana del proceso de beatificación del arquitecto Antoni Gaudí.

En este contexto, la agencia Veritas ha pedido unas declaraciones a Lluis Bonet i Armengol, vicepostulador de la Causa de Beatificación de Antoni Gaudí y rector de la Parroquia de la Sagrada Familia, quien ha dicho que la conclusión del proceso diocesano de la causa de beatificación de Antonio Gaudí «es el primer paso para su beatificación».

Desde que en 1992 se creó la Asociación Pro Beatificación de Antoni Gaudí, el proceso ha experimentado un gran impulso.

Integrada por dos arquitectos, un escultor, un escritor y un sacerdote, su objeto ha sido, según Bonet i Armengol, «dar a conocer la persona de Gaudí».

Para el vicepostulador de la causa «Gaudí fue un hombre de fe en nuestro Señor Jesucristo, en los misterios de su infancia, muerte, pasión y resurrección; con un gran sentido eclesial y de fidelidad a la Iglesia; con una vida de piedad que seguía los consejos evangélicos, en la que destacaba sobre todo su austeridad».

Se necesita «la ejemplaridad de la austeridad de Gaudí en una sociedad que lo derrocha todo», añade Lluis Bonet.

Otro aspecto de la espiritualidad de Gaudi que Bonet i Armengol destaca especialmente es «su sentido de admiración por la obra creadora de Dios, y su sentido de responsabilidad profesional, de trabajo bien hecho».

Un aspecto menos conocido del arquitecto es «su sentido de familia». Pese a que permaneció soltero, Lluis Bonet recuerda que «cuidó de su padre anciano y de una sobrina disminuida» y dice que también en esto «la sociedad puede tomar ejemplo y considerar el respeto y el cariño que debemos a los ancianos».

La vida de santidad de este genio ya ha producido consecuencias en gente que
se ha acercado a él movido en principio por su espectacular obra, pero que han encontrado en Antonio Gaudi mucho más de los que buscaban.

El escultor japonés Etsuro Sotoo se convirtió al catolicismo al contemplar la Sagrada Familia de Barcelona.

Respecto a esta majestuosa obra, Lluis Bonet nos recuerda una frase de su
autor: «yo construyo a la Sagrada Familia, pero la Sagrada Familia me construye a mí».

Lluis Bonet i Armengol afirma que aunque la humildad presidió toda la trayectoria del arquitecto catalán se hizo más notoria hacia el final de sus
días, cuando «deja la vanidad del mundo y se entrega totalmente a la Sagrada Familia».

La Asociación Pro Beatificación de Antoni Gaudí ha reunido más de 1024 hojas con testimonios sobre la fama de santidad del arquitecto catalán, que entregará a la Congregación para la Causa de los Santos en el Vaticano.