CIUDAD DEL VATICANO, 17 septiembre 2003 (ZENIT.org).- Con la ayuda de la Fundación que apoya la actividad de la Misión de la Santa Sede en la ONU, se acaba de inaugurar un centro de formación profesional para jóvenes de Timor Oriental.
Según revela un comunicado publicado este miércoles por el Consejo de la Justicia y la Paz, el centro fue inaugurado en días pasados en Dili por el arzobispo Renato R. Martino, presidente de ese organismo vaticano.
El instituto ha sido confiado a las religiosas Hijas de la Caridad, fundadas por santa Maddalena de Canossa (conocidas comúnmente como canossianas) y ha sido dedicado a dos religiosas de esa congregación, asesinadas en 1999, en los ataques provocados por milicias filoindonesias tras el referéndum de secesión de Indonesia (la italiana sor Erminia Cazzaniga e la timorense sor Celeste de Carvalho).
El centro ha sido financiado por la Fundación «Path to Peace» («Sendero hacia la paz»), creada hace doce años en Nueva York, por el mismo arzobispo Martino, para apoyar las iniciativas de la Misión de la Santa Sede en las Naciones Unidas.
El nuevo centro de formación se compone de un Instituto profesional y de una sala deportiva. El arzobispo, en la inauguración, deseó que contribuya a promover «una profunda educación de la juventud local en los principios éticos y religiosos» para que resista «ante las fuerzas que tratan de destruir el rico patrimonio espiritual del pueblo timorense».
Juan Pablo II se hizo presente en la inauguración del centro con un mensaje, llevado por monseñor Martino, en el que recuerda su visita a la isla en 1989 y desea que «el pueblo timorense avance en su camino de verdadera libertad en la comunidad internacional y que sea un país en el que reina la justicia y la paz».
En la inauguración del centro participó el presidente de la República de Timor Oriental, Xanana Gusmao, Premio Nobel de la Paz, que en junio recibió el Premio de la Fundación «Path to Peace» reservado a personalidades políticas que se han destacado por promover la paz y la democracia del propio pueblo.
La República Democrática de Timor Oriental nació oficialmente el 20 de mayo del 2002, tras un periodo de administración de las Naciones Unidas.
Con el 95% de los ciudadanos que se declaran católicos, Timor Oriental, país de algo menos de un millón de habitantes, es la nación con el mayor porcentaje de católicos de Asia.