El ataque del presidente busca «desviar la opinión pública de los verdaderos problemas que aquejan a nuestra sociedad», afirmó el presidente del episcopado, monseñor Baltazar Porras.
«Se quiere hacer creer que los obispos somos otra cosa», declaró el arzobispo de Mérida a la emisora Unión Radio.
Las acusaciones del presidente tienen lugar en concomitancia con la campaña que ha iniciado la oposición a favor del referendo revocatorio sobre el recorte del mandato de Chávez.
Chávez acusó a la cúpula de la Iglesia católica venezolana, durante su programa dominical radiotelevisado «Aló Presidente», de haberse convertido en «vocera de la oposición» y de ser «inmoral» e «indigna», enriqueciendo sus insultos con sonoros adjetivos.
Obispos y templos católicos han sido objeto de atentados y actos de violencia en los últimos meses.
Manifestantes oficialistas originaron en julio pasado violentos disturbios en la catedral de Caracas durante el velatorio del arzobispo de Caracas, cardenal Ignacio Velasco.