ROMA, lunes, 16 febrero 2004 (ZENIT.org).- En torno a 50.000 jóvenes se esperan entre el 5 y 8 de agosto próximo en Santiago de Compostela (España) en la Peregrinación Europea de Jóvenes 2004 (PEJ), una iniciativa organizada en el marco del Año Santo Jacobeo y que el sábado presentó en Roma monseñor Julián Barrio, arzobispo de Santiago, en el Consejo Pontificio para los Laicos a los distintos movimientos.
Cerca de cincuenta representantes de movimientos apostólicos de laicos se interesaron por la peregrinación –promovida por la archidiócesis de Santiago y por la Conferencia Episcopal española– y valoraron la importancia que supone en la construcción de Europa el Camino de Santiago.
El presidente del dicasterio –el arzobispo Stanislaw Rylko–, el secretario de dicho organismo, el obispo Josef Clemens, y el subsecretario, Guzmán Carriquiry estuvieron presentes en la presentación de la iniciativa.
Su objetivo «es el desarrollo de un encuentro de ámbito europeo en el que los jóvenes cristianos del Continente conozcan y profundicen las raíces cristianas de Europa y se comprometan en la construcción de la nueva Europa de la esperanza», subrayó el sacerdote Roberto Martínez, responsable diocesano de la PEJ.
«Testigos de Cristo para una Europa de la Esperanza» es el lema escogido para esta gran peregrinación cuyo sentido es «encontrarse con la fe de los apóstoles y, en este caso, del apóstol Santiago –explicó por su parte monseñor Barrio ante los micrófonos de Radio Vaticana–. Por esto pienso que acudir a Santiago es una ocasión para que los jóvenes puedan tomar conciencia de la herencia espiritual de nuestro continente».
«Y sobre todo –añadió– creo que los jóvenes deben recordar el sentimiento que manifestó el Santo Padre en Santiago en 1982, cuando pronunció un discurso profético: “Europa, vuelve a encontrarte, sé tú misma y descubre tus orígenes, reaviva tus raíces”».
Tras calificar la PEJ como «el acontecimiento más significativo del Año Santo Jacobeo», el padre Martínez confirmó a Veritas que se busca que sea «un anticipo y preparación de la gran Jornada Mundial de la Juventud de Colonia, que tendrá lugar en 2005».
La PEJ «superará, según se calcula, los 50.000 participantes –observó–: este fin de semana nos han confirmado que de Italia podrían asistir unos 1.500 jóvenes; de Portugal, sólo de la diócesis de Lisboa, podrían ser cerca de 15.000, y también hay grupos interesados de la antigua Unión Soviética, por ejemplo, cerca de 50 jóvenes peregrinarán desde Moscú».
18.000 jóvenes se han inscrito ya en el encuentro cuyo programa prevé dos fases. Del 31 de julio al 5 de agosto se organizará la llegada de los grupos de jóvenes que lo deseen realizando el Camino de Santiago a pie por alguna de las tradicionales rutas jacobeas.
La segunda fase abre la PEJ el 5 de agosto con una celebración de acogida en la plaza del Obradoiro, en Santiago de Compostela. El resto de los días se profundizará en las raíces cristianas de Europa gracias a la aportación de personalidades de la religión, la cultura, la economía, la política, la música y el arte.
A través de diversas actividades y celebraciones se pretende dar a conocer la Exhortación Apostólica Postsinodal «Ecclesia in Europa» de Juan Pablo II, que será la base del trabajo durante estos días.
El 7 de agosto, por la noche, se celebrará en el Monte del Gozo (en las afueras de Santiago de Compostela) una Vigilia de Oración en la que los jóvenes cristianos europeos presentarán una carta como su compromiso en la construcción de la Europa de la Esperanza. El día siguiente, cerrando la peregrinación, se celebrará la Eucaristía en la plaza del Obradoiro.
Más información en www.archicompostela.org.