VARSOVIA, viernes, 19 marzo 2004 (ZENIT.org).- Monseñor Jozef Michalik, de casi 63 años, arzobispo de Przemysl, fue elegido este jueves presidente de la Conferencia Episcopal de Polonia, en sustitución, después de 23 años, del cardenal Jozef Glemp, arzobispo de Varsovia.
Según el redactor de la agencia católica de prensa polaca KAI, Marcin Przeciszewsk, el cardenal Glemp, de 74 años, logró con «sus dramáticos llamamientos a la paz en los días sucesivos a la proclamación de la ley marcial, el 13 de diciembre de 1981, que el golpe de Estado no asumiera un carácter sangriento».
Como presidente de la Conferencia Episcopal y pastor de la sede primada, el cardenal tuvo que hacer de puente en los años ochenta entre el régimen comunista del general Wojciech Jaruzelski y los sindicalistas de Solidarnosc, liderados por Lech Walesa, que desempeñaron un papel decisivo para la llegada de la democracia al país.
Según Przeciszewsk, en los años en los que el cardenal Glemp ha sido presidente de la Conferencia, la Iglesia en el país ha logrado obtener «la introducción de la enseñanza de la religión en las escuelas, el reconocimiento legal del matrimonio religioso y sobre todo la prohibición del aborto».
