Según comunicó el arzobispado de Barcelona, el Papa se interesó mucho por los diversos aspectos pastorales de la realidad de la archidiócesis, por la que expresó su «estima y valoración» y otorgó la bendición apostólica a todos los fieles de la diócesis de Barcelona.
Monseñor Martínez Sistach mostró su agradecimiento al Papa por concederle esta audiencia, en la que se ha sentido acogido con mucha «cordialidad y afecto».
«Esta audiencia ha sido para mí una verdadera visita de comunión afectiva y efectiva con el sucesor de Pedro», declaró el prelado.
También invitó a toda la diócesis a «vivir con más intensidad nuestra comunión con la Iglesia de Roma y con su obispo». El arzobispo ofreció a Benedicto XVI un ejemplar de la versión catalana de la encíclica «Dios es amor» y un libro artístico sobre Antonio Gaudí, cuyo proceso de beatificación está en curso en Roma.