APARECIDA, viernes, 17, noviembre 2006 (ZENIT.org).- El presidente del Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM) afirma que la Quinta Conferencia General del Episcopado Latinoamericano y del Caribe tendrá una gran repercusión en la vida de los fieles y de las comunidades.
Según explica el cardenal Francisco Javier Errázuriz, arzobispo de Santiago de Chile, en esta entrevista concedida a Zenit, ha llegado el momento de que todos se concentren en el tema de la Conferencia, «Discípulos y misioneros de Jesucristo para que nuestros pueblos en Él tengan vida», y dejar que hable el mismo Jesús.

Es como «la Virgen dijo a los servidores de Caná: “Haced lo que Él os diga”», subraya el cardenal.

La Quinta Conferencia se celebrará en el Santuario de Aparecida, Brasil, del 13 al 31 de mayo de 2007, con la presencia de Benedicto XVI en la inauguración de las sesiones de trabajo.

--Como presidente del CELAM, ¿ha informado al Papa o a algunos de sus colaboradores más próximos sobre los preparativos de la Quinta Conferencia? ¿Cómo sigue Benedicto XVI esta fase de preparación?

--Cardenal Errázuriz: Gracias a Dios, pude conversar con el Papa en varias oportunidades. La primera vez, pocos días después de su elección como obispo de Roma. Pero también, en otras conversaciones con él, tratamos del tema de la Quinta Conferencia, que él aprobó, además de decidir también el lugar y la fecha. Tuve así varias audiencias y el Papa manifestó su alegría con este tema. Por otro lado, hay un encargado del Papa para los obispos, el cardenal Giovanni Battista Re, que también es presidente de la Comisión Pontificia para América Latina. Por eso, estamos en constante contacto con él. Ahora esperamos que el Santo Padre, en breve, dé los nombres de los tres presidentes de esta Conferencia.

--¿La Quinta Conferencia tiene lugar sólo con el objetivo de dar respuestas a los anhelos sólo de América Latina?

--Cardenal Errázuriz: La preparación de la Quinta Conferencia se concentra sobre todo en América Latina y el Caribe pero hay también 50 diócesis en Estados Unidos que ya están trabajando en el documento de participación, pues allí la presencia de los hispanos es muy fuerte. Y también contamos con los obispos de la Conferencia Episcopal de los Estados Unidos que participan en la comisión central de preparación y dan una contribución, muy importante para nosotros.

Está claro que no existe una parte de la Iglesia aislada de las demás. Cuando la Iglesia en África hace su reflexión ante Dios, eso también tiene repercusión en todas las demás Iglesias, también en Europa, en América Latina. Y siempre se da un estrecho contacto entre las Iglesias particulares, como ha sucedido con las Conferencias Generales realizadas por el Episcopado. Eso se vio, por ejemplo, en las Conferencias celebradas en Puebla, en Santo Domingo... Lo demuestra también la cantidad de veces que el propio Santo Padre cita estas conferencias en términos de importancia mundial.

--¿Cómo se aplicará concretamente lo que se debatirá en la Quinta Conferencia en la vida de los fieles y las comunidades?

--Cardenal Errázuriz: Los fieles ya lo están aplicando porque recibieron el tema del Papa y, cuando se reúnen en comunidades, no están pensando en qué ideas les enviamos nosotros los obispos, sino que el tema ya les dice algo personal y ellos lo están aplicando por sí mismos, según la palabra que la Virgen dijo a los servidores en Caná: «Haced lo que Él os diga». Jesucristo habla y, por tanto, se hace lo que Él quiere. Y todos ya están trabajando en este tema. En este período previo a la Conferencia, la expectativa de lo que ocurrirá es muy grande. Después, tendremos una gran misión continental. Enseguida, la comunidad nuevamente trabajará el tema de manera muy personal y con mucho compromiso. Tenemos muchas esperanzas de que haya una repercusión muy grande.