CIUDAD DEL VATICANO, martes, 23 junio 2009 (ZENIT.org).- Caritas afirma que la pobreza y el sufrimiento en la región sudanesa de Darfur y en el sur de Sudán ha llegado a tal nivel que allí existe una crisis humanitaria permanente.
Líderes de la Iglesia Católica de Sudán, miembros de Caritas que proporcionan ayuda a los más vulnerables sobre el terreno, y donantes mantienen un encuentro, los días 22 y 23, en la sede de Caritas Internacional en El Vaticano, para discutir cómo mejorar una respuesta humanitaria coordinada, informa la página web de Caritas Internacional.
La inseguridad tanto en Darfur como la creciente también en el sur de Sudán corren el riesgo de desestabilizar ulteriormente la región y crear mayores niveles de sufrimiento, advierte la agencia humanitaria.
Asisten a la reunión de Caritas el obispo Vincent Mojwok, presidente de Sudanaid (Caritas Sudán), arzobispo Paolino Lukudu Loro de Juba, obispo Eduardo Kussala de Tombura Yambio, obispo Antonio Menegazzo de El Obeid (que incluye Darfur) y Daniel Adwok Marco Kur, obispo auxiliar de Jartum.
El obispo Eduardo Kussala de Tombura Yambio dijo: «Sudán afronta un montón de desafíos. Allí hay en este momento un crisis humanitaria. La gente no tiene acceso a la salud, educación, agua y protección de los altos niveles de violencia».
«Caritas y la Iglesia son las únicas fuentes de educación, salud y servicios sociales en muchos lugares. La reunión del Foro de Partenariado de Sudán se propone crear una estrategia común para los miembros de Caritas y sus contrapartes eclesiales de manera que distribuyamos la ayuda del modo más efectivo».
La malnutrición está en el 16% en el sur de Sudán. Nueve de cada diez personas en el sur de Sudán viven con menos de 1 dólar al día. En 2007, el sur de Sudán registró la más alta tasa de mortalidad materna en el mundo, con 2.030 mujeres que mueren de cada 100.000 nacimientos.
Una precaria paz se mantiene en el sur, y medio de los cuatro millones de refugiados que se fueron durante decadas de combates han vuelto a sus casas. Sin embargo, el número de asesinatos se cree ahora que ha alcanzado a los de Darfur.
En Darfur, en el oeste de Sudán, 300.000 personas han sido asesinadas y 2,7 millones desarraigadas en el actual conflicto. La situación humanitaria en Darfur está también empeorando con 290.000 personas que abandonaron sus casas durante los nueve primeros meses de 2008.
Caritas en Sudán trabaja en ayuda de emergencia, bienestar social y desarrollo. Caritas sigue operando en Darfur, proporcionando a 297.000 personas alimentos, refugio, agua limpia, asistencia sanitaria, apoyo para encontrar medios de vida, orientación, actividades de pacificación y educación.