ROMA, viernes 5 de febrero de 2010 (ZENIT.org).- «No veo el momento de unirme” a los malteses “para conmemorar el importante aniversario de la llegada de san Pablo a sus costas”: así lo escirbe el Papa, en una carta enviada al presidente de Malta, George Abela, para agradecerle por la invitación de visitar la isla los próximos 17 y 18 de abril.
En la carta, publicada por el Times of Malta y retransmitida por Radio Vaticano, Benedicto XVI subraya que este evento será una ocasión importante para reflexionar y profundizar la fe cristiana.
La ocasión de la visita pastoral es el 1950° aniversario del naufragio de San Pablo en el archipiélago, que según la tradición sucedió en el año 60, durante su viaje hacia Roma.
El Apóstol de los Gentiles – narran los Hechos de los Apóstoles – fue acogido por la población local “con rara humanidad”. Aquí permaneció tres meses antes de dirigirse a Sicilia.
El Papa, según ha hecho público un comunicado de la archidiócesis de Malta, llegará a la isla en la tarde del 17 de abril. Tras el encuentro con las autoridades civiles, el Pontífice visitará la Gruta de San Pablo en Rabat.
La mañana del 18 de abril, el Papa celebrará una Misa en la ciudad de Floriana. Por la tarde, encontrará a los jóvenes malteses en La Valletta para volver después a Roma. El de Malta será el decimocuarto viaje apostólico internacional de Benedicto XVI, el tercero de un Pontífice en el archipiélago del Mediterraneo tras las visitas de Juan Pablo II en 1990 y en 2001.
Malta, que obtuvo la independencia del Reino Unido en 1964, tiene más de 410.000 habitantes, el 98% católicos. Desde el 1 de mayo de 2004 es miembro de la Unión Europea y desde el 1 de enero de 2008 ha adoptado el euro.
