ROMA, miércoles 15 de diciembre de 2010 (ZENIT.org).- Circos y Luna Park “catedrales” de fe y de tradición, signos de esperanza en un mundo globalizado es el tema del congreso organizado, del 13 al 16 de diciembre en Roma, por el Consejo Pontificio para la Pastoral de los Migrantes e Itinerantes.
Con él, el consejo pontificio intenta aportar respuestas a las “necesidades, demandas y expectativas” de los que realizan estas actividades de entretenimiento desde la perspectiva de la formación espiritual, el diálogo y la proximidad a las personas y las familias, informa Radio Vaticano.
Las intervenciones y los testimonios del congreso muestran las dificultades que surgen de una situación social sin el anclaje cultural, social o espiritual de las comunidades sedentarias, entre ellas la escolarización de los niños y la formación religiosa de los jóvenes y de los adultos.
El presidente del dicasterio, monseñor Antonio Maria Vegliò, inauguró los trabajos el lunes, con una intervención sobre La Iglesia al servicio de las gentes del circo y de las fiestas.
El presidente del Consejo Pontificio para la Cultura, el cardenal Gianfranco Ravasi, pronuncia una conferencia sobre El arte y la expresión de la fe al servicio del crecimiento espiritual de las gentes del circo y de las fiestas.
La ex-coordinadora nacional de la pastoral de las gentes del circo y de las fiestas de la conferencia de obispos de los Estados Unidos, la hermana Charlotte Hobelmann, habla sobre Circos y Luna Park, “catedrales” de fe y de tradición.
Finalmente, el profesor de Historia del espectáculo del circo y de la calle de la Universidad de Milán Alessandro Serena ofrece una ponencia titulada Circos y Luna Park, signos de esperanza en un mundo globalizado.
Los directores nacionales exponen también la situación actual de la pastoral en los distintos países, y empresarios, trabajadores y artistas aportan su contribución a la búsqueda de nuevas maneras para dialogar y transmitir la fe en el espectáculo itinerante.