LINARES, domingo, 12 diciembre 2010 (ZENIT.org).-  La directora de la Institución Teresiana, Loreto Ballester, invitó, especialmente a quienes comparten la misión y espiritualidad de la asociación de fieles presente en treinta países, a centrarse "con más verdad y fidelidad en Cristo y en el proyecto del Reino". 

El mensaje fue enviado a los asociados al inicio del actual tiempo litúrgico de Adviento.

Ballester recuerda en su misiva que se acerca el comienzo del Año Centenario de la Institución Teresiana (IT), y reconoce, en este Adviento y Navidad, "la oportunidad que la Iglesia brinda de un tiempo de conversión a Cristo y de alegrarnos al acogerle de nuevo, como Niño".

El mensaje fue enviado desde Linares, "ciudad --recuerda la directora de la IT-- en la que nació Pedro Poveda a la vida y a la fe, en la que puso en marcha importantes acciones para el desarrollo de la misión de la Institución como la Academia, el Centro Pedagógico, la Escuela Especial para la clase Obrera y donde acompañó la vocación y el compromiso de las primeras jóvenes que recibieron de Dios la vocación teresiana".

La invitación que hace a la asociación, "como pueblo en el Pueblo de Dios", es a "escuchar de nuevo, como Israel en su peregrinar, la llamada a volver los ojos a El, a cómo es y actúa, a abrir el oído a lo que El, una vez más nos dice, y a mover nuestros pasos con los suyos".

Invita Ballester "a vivir con novedad las dos experiencias básicas en la vida de toda persona y en toda vocación cristiana: te quiero, eres mi Pueblo a quien me manifiesto, y te necesito, porque hay otros muchos a quienes quiero manifestarme".

Sugiere buscar, como el pueblo de Israel, "volver a fijar los ojos en el Dios que se ha empeñado en entrar en este mundo, nacido de las entrañas de una madre y quiere permanecer en él", "con la experiencia agradecida al Dios que acompaña y también con preguntas, con dificultades, con necesidad de perdón y de nueva seguridad en El".

Por ello, estimula a pedir "aprendiendo junto a María a la que escuchamos su invitación, ‘haced lo que El os diga', centrarnos con más verdad y fidelidad en la persona de Cristo y en su proyecto. El nos llevará con nuevo vigor al proyecto de Reino de Dios. Y se realizará la clara afirmación de Pedro Poveda [hecha en 1915]: ‘La Encarnación bien entendida, la persona de Cristo, su naturaleza y su vida dan para quien lo entiende la norma segura para llegar a ser santo, con la santidad más verdadera, siendo al mismo tiempo, humano, con el humanismo verdad. Siendo así, seremos generosos y nuestra obra será simpática'".

El modo de acercamiento a Cristo que propone Loreto Ballester pasa este año por tres modos de manifestarse Cristo: en su Palabra, especialmente en los textos de la liturgia; en sus pequeños, especialmente en los indefensos y olvidados que están cerca, en los que sufren soledad; en la hermandad, especialmente con aquellos que forman parte de la vida cotidiana (familias, comunidades cristianas) fortaleciendo la esperanza y ofreciéndose el perdón mutuo.

"Navidad es sorpresa ante un Dios que, en la búsqueda de cercanía a nosotros, hace suya la condición humana", afirma la directora de la asociación.

"¿Podremos abrir caminos a la cercanía de Cristo a cada uno, a nuestras familias, a nuestros grupos, a la Iglesia, con gestos concretos de acogida de la Palabra, con gestos hacia los pequeños, con gestos que fortalecen la hermandad?", se pregunta.

Y concluye reiterando que, en este "Año de Gracia", Adviento y Navidad, "nos introducen en una mayor cercanía a Cristo en quien encontramos ‘la norma segura para llegar a ser santo, con la santidad más verdadera, siendo al mismo tiempo, humano, con el humanismo verdad'".