CIUDAD DEL VATICANO, sábado, 25 diciembre 2010 (ZENIT.org).- Benedicto XVI confesó en su mensaje para esta Navidad que sigue con preocupación los dramas humanitarios que vive en estos momentos América Latina y el Caribe, así como las tensiones entre Nicaragua y Costa Rica.
Antes de impartir su bendición «Urbi et Orbi», el pontífice dirigió en Mundovisión felicitación navideña haciendo un apremiante llamamiento a la solidaridad a favor de las comunidades necesitadas del subcontinente americano.
Como era lógico, comenzó pidiendo ayuda a favor «de los que todavía sufren por las consecuencias del terremoto devastador y la reciente epidemia de cólera en Haití».
Lugo pidió que no se olvide «a los que en Colombia y en Venezuela, como también en Guatemala y Costa Rica, han sido afectados por recientes calamidades naturales».
Por último, pidió que se impulse «el diálogo entre Nicaragua y Costa Rica», en referencia a la disputa fronteriza entre Costa Rica y Nicaragua, surgida en octubre, por las tareas de dragado que se llevan a cabo en el Río San Juan y el reclamo territorial de ambos países sobre Isla Calero.
En su felicitación en español, el Papa dijo: «¡Feliz Navidad! Que la Paz de Cristo reine en vuestros corazones, en la familias y en todos los pueblos».