CIUDAD DEL VATICANO, lunes 27 de junio de 2011 (ZENIT.org)-. Benedicto XVI reconoció los martirios sufridos en España en 1936 por el obispo de Lérida Salvio Huix Miralpeix y por Josefa Martínez Perez, de la congregación de las Hijas de la Caridad de San Vicente Paúl, y doce compañeras.
Lo hizo este lunes al recibir en audiencia privada al prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos, el cardenal Angelo Amato, y autorizar a esta congregación la promulgación de diversos decretos referentes a milagros, martirios y virtudes heroicas, informó la Oficina de Información de la Santa Sede.
El obispo Huix Miralpeix nació en la localidad de Santa Margarita de Vellors el 22 de diciembre de 1877 y fue asesinado por odio a la fe en Lérida el 5 de agosto de 1936.
Las mártires del grupo de Josefa Martínez Pérez y doce compañeras murieron también por odio a la fe en diversos lugares de la arquidiócesis de Valencia entre el 19 de agosto y el 9 de diciembre de 1936.
Otro decreto reconoce las virtudes heroicas del siervo de Dios José María García Lahiguera, arzobispo de Valencia y fundador de la congregación de las Hermanas Oblatas de Cristo Sacerdote.
Este prelado nació en Fitero el 9 de marzo de 1903 y falleció en Madrid el 14 de julio de 1989.
Otro de los decretos reconoce un milagro atribuido a la intercesión de la venerable sierva de Dios María Inés Teresa del Santísimo Sacramento, en el siglo Emanuela de Jesús Arias Espinosa, fundadora de las congregaciones de las Misioneras Clarisas del Santísimo Sacramento y de los Misioneros de Cristo para la Iglesia universal.
La religiosa nació en la localidad mexicana de Ixtlán del Río el 7 de julio de 1904 y falleció en Roma el 22 de julio de 1981.
La Iglesia también reconoció hoy oficialmente el martirio de un sacerdote diocesano austriaco asesinado por odio a la fe en el campo de concentración de Halle sul Saale, en Alemania, el 13 de noviembre de 1944.
Se trata del siervo de Dios Carlo Lampert, pro-vicario de la administración apostólica de Innsbruck Feldkirch, nacido en Göfis el 9 de enero de 1894.
Un decreto reconoce un milagro atribuido a la intercesión de la venerable sierva de Dios Ildegarda Burjan, fundadora de la Sociedad de las Hermanas de la Caritas Socialis.
Esta laica y madre de familia nació en la localidad alemana de Görlitz el 30 de enero de 1883 y falleció en Viena el 11 de junio de 1933.
La Iglesia también reconoció hoy un milagro atribuido a la intercesión del sacerdote diocesano Mariano Arciero, nacido en Contursi (Italia) en 1707 y fallecido en Nápoles en 1788.
Y otro milagro atribuido al sacerdote profeso de la orden de los Frailes Predicadores y fundador de las Hermanas del Tercer Orden de Santo Domingo en Betania Juan José Lataste, nacido en la localidad francesa de Cadillac en 1832 y fallecido en Frasne-le-Château en 1869.
Otro decreto aprobado hoy reconoce las virtudes heroicas de tres sacerdotes y de cuatro mujeres de diversas nacionalidades.
En primer lugar, del sacerdote profeso de de la orden de los Clérigos Regulares Teatinos Giovanni Marinoni, nacido en Venecia en 1490 y fallecido en Nápoles en 1562.
También del sacerdote diocesano indio Matteo Kadalikattil, fundador de la congregación de las Hermanas del Sagrado Corazón de Jesús para las Mujeres, nacido en Edapady en 1872 y fallecido en Palai en 1935.
Y del sacerdote diocesano Raffaele Dimiccoli, nacido en la localidad italiana de Barletta en 1887 y fallecido en 1956.
Las cuatro siervas de Dios a las que la Iglesia reconoce las virtudes heroicas son Sofia Czeska-Maciejowska, fundadora de la congregación de las Vírgenes de la Presentación de la Bienaventurada Virgen María, nacida en Budziszowice (Polonia) en 1584 y fallecida en Cracovia en 1650.
También Maria Giuseppina Benvenuti (en el siglo, Zeinab Alif), clarisa nacida en Sudán entre los años 1845 y 1846 y fallecida en la localidad italiana de Serra de’ Conti en 1926.
Laura Meozzi, hermana profesa del Instituto de las Hijas de María Auxiliadora, nacida en Florencia (Italia) en 1873 y fallecida en Pogrzebień (Polonia) en 1951.
Y finalmente, Luigia (Gina) Tincani, fundadora de la Unión de Santa Catalina de Siena de las Misioneras de la Escuela, nacida en la localidad italiana de Chieti en 1889 y fallecida en Roma en 1976.